¿Están las discográficas «haciendo la cama» a la iTunes Music Store?

Cuando Apple lanzó la iTunes Music Store, las discográficas se pusieron de acuerdo bastante rápidamente con la compañía de Cupertino, ya que tal modelo de negocio había dado resultados discretos hasta el momento en aventuras de otras empresas. Se equivocaron y ahora, simplemente no hay quien «tosa» a Apple. Así que cuando no se puede controlar un negocio, no queda otra opción que envenenarlo.

Con lo que no contaron las discográficas cuando el proyecto de la ITMS se puso en marcha, es que Apple tenía ya dos puntos tremendamente fuertes por la calidad y la amplia plataforma instalada para canalizar el mercado potencial de ventas: iTunes y el iPod, que por aquellas fechas era ya considerado el gadget más «cool». La interconexión de la tienda, el software y el reproductor era y es totalmente perfecta y transparente, el sistema de protección es lo suficientemente bueno para que no se pudiera saltar con facilidad y las exigencias de ese DRM en cuanto a reproducción y grabación son los bastante amplias para que no resulten tan restrictivas como para que el usuario siga comprando.

Otro punto fuerte de la iTMS era la capacidad de vender singles. Hace dos años ya comentaba que el retorno del single, es decir, la canción unitaria frente a la compra obligatoria de un CD con un numero indeterminado de canciones «no interesantes» podría ser otro de los acicates que moverían al usuario hacia la compra en línea.

Y así, poco a poco, poniendo un pie detrás de otro, Apple se ha hecho con el mercado de la música en línea … y las discográficas, que etiquetaron este modelo de negocio como de «baja fiabilidad» no le dieron mayor importancia al asunto, enfrascadas como estaban (y están) en tratar de proteger las ventas de sus discos físicos y luchar contra la piratería.

Y cuando quisieron reaccionar ya era tarde. ¿Primer intento? evidentemente, subir los precios: en abril del año pasado se destapó el rumor de que las compañías querían establecer un precio de entre 1,25 y 2,99 dólares por canción. Sin embargo, los jugosos beneficios que se embolsan a través de la venta on-line les ha hecho, de momento, contenerse.

Esta es una guerra, y la vamos a ganar

Como en toda guerra comercial, los planes son a largo plazo y tienen múltiples batallas intermedias y frentes en los que luchar. Es evidente que este modelo de negocio funciona, pero quien más rendimiento va a sacar es quien controle (como ha estado haciendo Apple hasta ahora) el canal de distribución, porque será quien permita establecer un mercado variable de precios y suscripciones.

Las discográficas lo saben y hasta ahora no tenían un mercado alternativo al de los reproductores de audio donde Apple tiene un pie tan firmemente asentado, que en varios años va a ser difícil desbancarla.

Primero un mercado, luego una guerra

El mercado alternativo está empezando a emerger. Y es la telefonía. No todo el mundo tiene un reproductor de audio, pero si un teléfono móvil. Conforme avanza el tiempo, las tecnologías punteras en telefonía se adaptan a los terminales más convencionales, de manera que hay muy poco tiempo entre una generación y la siguiente de teléfonos móviles. Un ejemplo práctico son las cámaras de fotos: de ser un extra de lujo se ha convertido en un «habitual» en los teléfonos de gama media y de la misma manera, la capacidad de reproducir grandes bibliotecas de música en el móvil pasará a ser «un extra más» en los terminales en un tiempo realmente corto.

Los operadores de telefonía y las discográficas lo saben, y están empezando a hacer los correspondientes movimientos y planes al respecto.

Pero para situar a la telefonía móvil por encima de el mercado de los reproductores de audio y hacerse con el mercado a través de sus propios medios de distribución, han de empezar una guerra contra el modelo actual, que tiene su máximo exponente en la iTMS. El ataque no puede ser directo (puesto que inmediatamente perderían lo que esta siendo un gran negocio), y lo van a evitar mientras dan tiempo a preparar las correspondientes infraestructuras con las que puedan asestar un golpe definitivo y demoledor. ¿Cual es la mejor manera de ganar esta guerra sin dar la cara? Envenenando a la competencia. Lentamente. Y eso si lo pueden hacer.

Compreme usted este paquete, por favor

El modelo de negocio para las ventas de música, igual que para las películas en televisión y cines, es la de los «paquetes». No se puede comprar un solo album en concreto para distribución, sino que para comprar ese album, has de comprar un paquete compuesto por una cantidad indeterminada de obras menores que la discográfica (o la productora de cine o televisión) impone junto con la compra de ese disco.

Y es allí donde las discográficas pueden introducir sus dosis de veneno, lenta y letalmente, de manera que en un caso extremo, una tienda de música en línea puede tener una primera fila de «grandes éxitos de primera linea» (que evidentemente, han de tener cara a la galería y que todas las tiendas tienen) pero un fondo de catálogo pobre y sin calidad, envenenado por la selección que obligan las discográficas a «tragarse» junto con los grandes éxitos del momento.

Y una de las grandes ventajas, en general de las tiendas en linea de música no son las grandes estrellas, sino el fondo de catálogo original, cuanto más amplio mejor, que permite al usuario buscar y encontrar cosas que resultan absolutamente imposible conseguir en las tiendas físicas. La batalla es allí, en el catálogo de medio y de fondo.

Este comportamiento se ve reflejado claramente cuando se hacen búsquedas de ciertos temas y estilos de música: uno se encuentra (y está empezando a pasar en la iTMS) albumes tan pobres de calidad (de gasolinera de carretera) con versiones de temas originales que uno se pregunta como han llegado esas auténticas bazofias hasta allí, y encima a precio «normal» de la tienda, no precio de «gasolinera».

Cómo reaccionar?

Apple podría llevar la batalla el mercado que las discográficas están preparando con tanto mimo, el de la telefonía móvil, en dos frentes muy claros:

– Ofrecer kits de desarrollo de iTunes mobile a todos los grandes fabricantes de manera que pudieran ofrecer el software y la tienda como un extra (el extra más cool, puesto que el éxito de Apple «es» ahora, evidente) en sus teminales con capacidad de reproducción.

– Ampliar la cobertura de sincronización de los teléfonos con iTunes a todos aquellos fabricantes que ofrezcan iTunes mobile en sus terminales.

Pero estos golpes no pueden retrasarse. El tímido (y retrasado) intento del iPhone no puede quedarse solo en eso, puesto que la desidia de las discográficas con el modelo de música en linea permitió a Apple situarse en la cima. Y repetir el error de los que ahora serán sus competidores le podría dar severos quebraderos de cabeza.

Por otro lado, si los fabricantes de móviles le «hacen el vacío» a Apple y se niegan a incorporar la solución de iTunes + DRM en sus terminales, la empresa de Cupertino se queda con poco margen de maniobra… salvo empezar a incorporar en el iPod funcionalidades de teléfono móvil, que pongan la frase «en pasiva». Si los móviles no van a iTunes, tal vez Apple tenga que hacer que el iPod se convierta un móvil…

En cualquier caso, poder ver el tablero donde se está jugando esta partida e ir observando los movimientos de unos y otros, no deja de ser apasionante.

4 Comments

  1. Anónimo

    Pues sí, lo es. ¿Sería mejor para Apple sería licenciar «iTunes mobile» a las marcas de telefonía móvil o hacer un iPodphone? Si todo el mundo tiene capacidad y música en sus móviles… se preferirá eso a un iPod… sería el principio del fin del iPod? Si llega el iPodphone… ¿cómo se meterá en un mercado con una competencia tannnn posicionada?

    Es realmente interesante.

  2. Anónimo

    Como siempre las discográficas no titnen bastante con participar en un negocio que funciona muy bién pero que ha «inventado» otra empresa y que, evidentemente, es la que lo controla. Lo quieren todo: producir las canciones, distribuirlas, tener el monopolio y poner precios abusivos.
    ¿Pero es que esta panda de ineptos no se da cuenta de que la única forma de combatir la pirateria es vender a precios razonables?.
    El otro dia vi una reedición de un disco de Supertramp con más años que el copón a 21 Euros; vaya cara más dura que tienen. Personalmente me niego a comprar música superamortizada a precios de última novedad.
    Entre otras muchas cosas, es éxito de la iTMS se debe a poder comprar canciones sueltas y a unos precios asequibles. ¿Que se les ocurre a los espabilados de turno?, doblar el precio (doble negocio) y a vender paquetes con toda la bazofia que nadie quiere comprar. Cómo la gente no es imbécil, el resultado, evidentemente, va a ser incremento de la pirateria otra vez.
    No señores, se les acabó la teta de la que han estado chupando durante años. Ahora se va a vender la música de calidad y al gusto del consumidor, y los CD completos ya me los haré yo en casa.

  3. Anónimo

    ¿ Pero es que nadie se ha dado cuenta de que realmente el «proyecto» a alcanzar por el señor Jobs y el que realmente hará a Apple ganas cientos de Millones, es el de convertir la ITMS en el centro mundial de venta de PELICULAS por internet?

    Lo de vender música a 1 Euro es solo un trampolín.

    En menos de un par de años podremos comprar cualquier película en MPEG4 H264 por 10 Euros.

    Las relaciones de Apple con la industria de Hollywood ha sido siempre muy cordial. Y ya hay rumores de posibles intentos de negociaciones con la Warner y con la FOX.

    El tiempo lo dirá… Pero recordar bien este post dentro de un par de años.

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