Otro rumor que se cae (al menos este año) era los cables de carga a juego con el color del teléfono. Como es obvio, es una idea muy “cuqui” que podría encajar con la visión del dispositivo como elemento de moda y potencialmente multiplicar la venta de cables para aquellos que quieren estar siempre conjuntados, en casa, en el coche, en la casa de la playa, en el otro coche… ya me entiendes, o sea.
Pero de momento parece que Apple ha dejado pasar de largo la sugerencia, y ha seguido a lo que está, a fabricar en masa para mantener los precios.
Otros rumores decían que Apple -por fin- hacia los cables más largos, algo que tampoco ha sucedido (y eso que nosotros estábamos al 100% con esa necesidad).
Que seguro que otros fabricantes ven el hueco y se ponen a ello, pero no será con la marca Apple.
Todos los modelos de iPhone 15 se venden con un cable USB-C a USB-C de un metro de longitud, pero los cables están trenzados para una mayor durabilidad.
Apple no vende cables trenzados de USB-C a USB-C en colores que coincidan con los iPhones, aunque hay un cable Thunderbolt 4 negro de 1 metro que permite velocidades de transferencia USB 3.1 de hasta 10 Gb/s en el iPhone 15 Pro.
