OS X 10.11 El Capitan: corrección de color en fotografías y vídeos y un truco más

En OS X 10.11 El Capitan y los Mac que portan un sensor de luz ambiental, además de cambiar el brillo de la pantalla en función de las condiciones de iluminación ambiental, también se hacen ajustes en la gama de color que se muestra en pantalla para en, un mejor esfuerzo, tratar de mostrar una fotografía o un vídeo con la mejor calidad posible.

Esta característica, pensada para el usuario de consumo, está bien, pero para los profesionales es un continuo dolor de cabeza y de hecho, muchos desconocen el tratamiento que da OS X 10.11 El Capitan a esta forma de mostrar imágenes con lo que se encuentran que los retoques de color y gama realizados en unas condiciones no tienen nada que ver cuando el resultado final se muestra en otro ordenador. Sí, un poco caótico.

La mejor forma de evitar este problema es desactivar el ajuste automático de brillo de la pantalla para poder, durante la edición de este tipo de contenidos, tener claro y meridiano que los ajustes de gama serán los adecuados sobre todo cuando éstos se realizan de forma manual, ya que afectan especialmente a las sombras y áreas oscuras.

Esta opción (si está disponible en tu Mac) está ubicada en Preferencias del Sistema > Pantallas.

Evidentemente, esto obliga a jugar manualmente con el brillo de la pantalla para maximizar la autonomía de la batería, pero es un mal menor en este caso concreto en el que la calidad del trabajo (y la repetición del mismo cuando estás en condiciones controladas) está por delante.

Un truco más: la desactivación del brillo automático (y de los ajustes automáticos de gama) también soluciona en algunas ocasiones que las animaciones del sistema y el desplazamiento por ventanas no sean todo lo fluidos que deseamos, evitando micro atascos y situaciones en las que el interfaz parece que no responde correctamente, sobre todo en situaciones en las que la iluminación ambiental está cambiando muy deprisa o hay variaciones en la frecuencia del punto de iluminación que no son visibles por el ojo humano, pero si son detectadas por el sensor que se ve obligado a cambiar continuamente la gama, favoreciendo la ralentización del interfaz del sistema.