Se llama Pegar (o duplicar) exactamente. Cuando creamos una copia de un archivo, se duplican todos sus parámetros más allá de los evidentes, como la fecha de creación, modificación, contenido y otros metadatos, pero hay un juego de características que no se duplican: los permisos. Al copiar y pegar o duplicar archivos, los permisos se adaptan al entorno. Por ejemplo, si estás trabajando con un archivo del sistema con un juego de permisos especiales, al duplicar el archivo este adquirirá permisos de usuario, perdiendo por el camino los permisos anteriores.
Es aquí donde entra exactamente. Podemos activar esta forma de pegar un archivo o duplicarlo que respeta los permisos del original usando, en el caso de pegar, ⌘⌥⇧V y en el caso de duplicar, ⌘⌥⇧D.
Pues es el mismo atajo que el de “Pegar con el mismo estilo” para el texto.
Peeeeeeeeeero se este atajo de teclado se usa solo para archivos. 😛