El regulador ha dado la razón a Vodafone y Orange, que acusaban a la filial de Telefónica de haber impedido que sus clientes se dieran de baja y cambiaran de operador.
La Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) ha sancionado con 350.000 euros de multa a Movistar por considerar que durante las navidades de 2005 impidió que sus clientes abandonasen la compañía para pasar a otros operadores.
El caso llegó al organismo regulador a finales de ese año y principios de 2006, cuando Vodafone y Orange decidieron denunciar a la filial de Telefónica por cerrar su servicio de traspaso de clientes durante los últimos días del año, cuando los usuarios utilizan más los servicios de telefonía, privando a sus competidores de importantes ingresos.
Ante tales acusaciones, Movistar alegó problemas técnicos que le llevaron a cerrar el servicio los días 29 y 30 de diciembre de 2005 y el 2 de enero de 2006, retrasando el cambio de compañía de los clientes que lo habían solicitado desde el 21 de diciembre de 2005.
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