Aunque todavía está por ver la incidencia real que tiene en la vida cotidiana las inteligencias artificiales generativas, es cierto que su capacidad de utilizar el lenguaje natural para presentar datos y elaborar textos muchas veces es mucho más útil que el mero listado de enlaces a páginas web que -por ejemplo- Siri lleva haciendo desde hace años.
En vez de tener que visitar continuamente la Wikipedia para recolectar datos sobre un monumento, una ciudad, o una situación, puedes preguntar eso a ChatGPT y te devolverá un texto perfectamente redactado para que lo leas en voz alta como si tú supieras la respuesta de memoria (porque te gusta hacerte el cuñado, lo sabemos).
En muchas ocasiones, en vez de tener que sacar el iPhone y teclear, puede resultarte más sencillo activar Siri en el Apple Watch y usar la app Petey para que se conecte al motor de ChatGPT y te traiga las respuestas más completas y condensadas.
Petey cuesta 4,99€ (compra única) y puedes crearte una esfera donde tengas su acceso directo para mayor comodidad. Como ventaja extra, según asegura el desarrollador en la App Store, la app no recoge ningún dato del usuario.
Apple parecen los únicos que no acaban de darse cuenta de lo que va a suponer la Inteligencia Artificial. Llevan años invirtiendo en el coche (¿de baterías? ¿están locos?) y las gafas (¿para?), además del reconocimiento facial, y esto se les ha escapado. No sólo hay que desarrollarlo, sino inventar cosas en las que puede ser útil. Incluso Microsoft ya está en eso, añadiendo a Office una extensión llamada “Copilot” que hace las cosas por ti (“envía un correo electrónico a mi suegra diciéndole que la quiero mucho”). Con Apple seguimos con Siri, que no sirve para nada.
La Inteligencia Artificial debería permitir cambiar radicalmente la interfaz de las aplicaciones (y del sistema operativo). Eso para empezar. Y se puede usar para cosas que no imaginamos aún. ¿Dónde está Apple?
La única innovación con gran potencialidad ha sido el Apple Watch, no como reloj, sino concebido como instrumento de supervisión médica. Pero aunque la idea era genial ahí tampoco consiguen avances importantes. Dicen que algún día nos medirá el azúcar en sangre. De momento tenemos un reloj al que podemos cambiarle las esferas.
Me da que andan muy distraídos en tonterías mientras los grandes cambios ni los huelen.
Wait and see.
Apple no fue quien inició la telefonía móvil. Pero fue quien la revolucionó hasta el punto que hoy en día todos los móviles son conceptualmente derivados de primigenio iPhone 2G.
En cuanto al Apple Watch, hace más que cambiar esferas; a mí me llevó a urgencias donde estuve dos días ingresado a causa de una arritmia.
De no haber llevado ese día puesto un Apple Watch, quien sabe cuanto de mal habría acabado la cosa.
Y mientras pasaba esto Apple en qué estaba… esa es la cuestión…
Ya te dije que Apple no fue el primero en crear la telefonía móvil, fue Motorola; ni el primero en ganar dinero con ella, fue Nokia. Pero sí fue quien dio un vuelco revolucionario al concepto de la telefonía móvil, luego vino la ruina de Nokia, pero esa es otra historia.
Si se piensa que Apple no está haciendo nada y se está quedando atrás, es desconocer como funciona esa compañía.
GPT es embrionario como lo fue el primero móvil de Motorola
Lo dicho, wait and see
Interesante esta opinión de Muslim Farooque, analista de inversiones