En un documento de soporte de la aplicación Apple Configurator 2 de Apple[note]Gratuita, se puede descargar desde la Mac App Store[/note], se cita expresamente la necesidad de esta aplicación para restaurar del iMac Pro bajo ciertos entornos, específicamente, cuando ha habido un fallo de corriente durante una actualización del sistema, que puede causar que el iMac Pro no responda adecuadamente a las órdenes del usuario. Básicamente no responda adecuadamente al usuario es una frase figurativa, porque lo que ocurre es que el iMac Pro se bloquea[note]Brick total[/note] y no responde.
Para restaurar un iMac Pro después de un problema de este tipo, necesitas otro Mac que actúe como host, que ejecute High Sierra, ambos la última versión, y Apple Configurator 2.6 descargado en ese Mac que tiene que estar conectado a Internet. Es necesario conectar con un cable USB-C o Thunderbolt desde el iMac Pro que no responde al ordenador host. El cable debe conectarse al puerto USB-C/Thunderbolt más cercano al puerto Ethernet del iMac Pro. El siguiente paso es encender el iMac Pro y mantener pulsado el botón de arranque durante 3 segundos.[note]No verás ningún tipo de actividad en pantalla, así que no te preocupes[/note]
Apple Configurator detectará el iMac Pro, deberás seleccionar el dispositivo iBridge en el navegador de Apple Configurator 2 y solicitar que se restaure y actualice el dispositivo iBridge -el chipset T2- para que funcione. Una vez finalizada la actualización, el iMac Pro se reiniciará en macOS[note]Y ya puedes quitar los cables[/note].
Este es el tipo de cosas que conviene recordar, si tienes un Mac Pro, y guardar por si acaso. Un fallo de corriente durante el proceso de actualización no es habitual[note]A mi no me ha ocurrido nunca y solo puede denominarse “Mucha mala suerte”[/note], pero si ocurre, suele causar muchísimos problemas. En el caso de un Mac mas tradicional, suele obligar a la reinstalación del sistema “encima” del actual para asegurarnos de la integridad del mismo.
5. También hay unas cosas llamadas SAI o UPS que evitan estos y otros muchos sustos a partir de tan solo 150€…
No sé por qué la gente les tiene tanta ‘mania’.