Pero sin adaptar el software, estos núcleos no pueden ser utilizados para nada más que para consumir energía. El verdadero reto está entonces en el nivel de desarrollo de software, e Intel ha dado el tono en uno de sus Blogs, la manera estándar y oficial de entregar información delicada.
En este blog, uno puede leer que se supone que los desarrolladores deben optimizar su software para 2, 4, 8 o 16 núcleos, e incluso, en el futuro cercano para decenas o incluso cientos de ellos.
Esto doblará la carga de trabajo para los programadores. La optimización tomará más y más tiempo y deberá empezar antes de escribir la primera línea de código. Incluso antes de que el proyecto comience uno debe saber qué estará paralelo y cómo. El reto es colosal y requiere no sólo de herramientas nuevas, sino de educar a los programadores en tareas usualmente reservadas para personas que operan estaciones de trabajo.
Uno entiende mejor en este contexto porqué Apple decidió hacer una pausa en la mejora de la estética de Mac OS X al anunciar Snow Leopard, que es precisamente el inicio de este nuevo reto.
Fuente: Hardmac
Claro, todos los desarrolladores vamos currar el doble (optimizando para 2 cores), el cuádruple (para cuatro cores), etc. Sólo para que los de Intel puedan vender sus próximos y nuevos procesadores y los usuarios noten la diferencia. Ellos se llevan la pasta y nosotros el trabajo. Que se apliquen el cuento y saquen algo que optimice el código actual.
Vaya tipos más listos.
Creo que voy a fabricar ruedas cuadradas, todos los coches podrán llevar cuatro, seis, ocho y probablemente en el futuro muchas más. Pero claro, las carreteras que las vuelvan a hacer de nuevo de forma que estos coches con ruedas cuadradas se desplacen bien sobre ellas.