Las batallas legales desatadas a raíz de Google Book Search, el ambicioso proyecto de digitalización de bibliotecas que permite consultas en libros, no han impedido que Google intente tentar a las editoriales de Estados Unidos y Reino Unido para que vendan el acceso on line a sus obras que aún estén protegidas con copyright.
La idea es que Google Book Search deje a las editoriales establecer los precios para sus libros y ponerlos a disposición de los internautas a través de su buscador. No estaría permitido a los usuarios guardar una copia del texto en sus ordenadores ni copiar páginas del libro.
Actualmente, los usuarios de Google pueden acceder a libros cuyos derechos de copia han expirado o que cuentan con el permiso de las editoriales para ser consultados en la Red.
Fuente y artículo completo en: El Mundo