Apple falló los requerimientos de la primera enmienda en su caso contra varios periodistas de Estados Unidos.
La Electronic Frontier Foundation (EFF), ganó la semana pasada el derecho a revisar documentos secretos de la empresa. Estos documentos revelan que Apple realizó unas citaciones que forzaban a dos reporteros a revelar sus fuentes sin antes conducir una investigación dentro de la empresa.
La EFF dijo que éste hecho era crucial para el caso.
Esto se debe a la primera enmienda y a la Constitución de California, que requieren que Apple agote todas sus alternativas antes de citar periodistas. Los documentos también demuestran que Apple jamás tomó declaraciones de sus empleados, no hizo citaciones (aparte de las de los periodistas), y jamás pidió declaraciones firmadas o información bajo juramento de sus propios empleados.
Apple tomó acción legal, alegando violación a las leyes de derechos de marca. En diciembre, la empresa demandó a varias personas conocidas como “John Does” (Don Nadie), quienes parece ser habían filtrado información sobre el producto. Al parecer la única investigación de ordenadores que hizo Apple, fue una simple búsqueda en los servidores de correo y un examen de rutina al servidor de archivos.
Apple no examinó los ordenadores individuales de cada empleado, los discos duros, los extractos telefónicos, las fotocopiadoras, o cualquier otro dispositivo de transmisión de información. Apple tampoco tomó declaraciones bajo juramento de los empleados que tuvieron acceso a la información filtrada.
Una Corte de California dictaminó que las citaciones podían hacerse, tanto a los proveedores de correo electrónico de los periodistas, como a los editores del sitio Web. Los periodistas hicieron una apelación y la Corte ordenó a Apple que exponga más pruebas, pues de lo contrario aceptará la apelación de los periodistas.
Todavía no hay fecha para esta audiencia.
Fuente: macworld