No sólo por las industrias que ha destruido (en el año 2010 se vendieron alrededor de 109 millones de cámaras con la óptica incorporada, en 2018 sólo 9 millones), sino también por las que ha creado (piensa en Uber, Instagram,…)
Ningún otro producto en la historia ha supuesto un cambio tan profundo en todos los niveles: social, cultural, económico…