La familia 400 de Radeon Pro está construida bajo la arquitectura Polaris de AMD. La arquitectura Polaris combina de forma precisa el proceso FinFET de 14 nm más reciente con las avanzadas tecnologías de eficiencia energética, puerta de acceso y temporización de AMD para ofrecer una refrigeración superior y una experiencia de trabajo y juego silenciosa.
Esta gráfica, que porta Core Next de cuarta generación, ofrece un ancho de banda de memoria de 80 GB/s y cuenta con hasta 16 unidades de computación (1024 stream processors) y 1,86 Teraflops de procesamiento para la Radeon Pro 460, mientras que la 455, la que viene de serie, ofrece 12 unidades de computación para 768 stream processors.
El MacBook Pro viene con dos opciones al respecto de tarjeta gráfica, la de serie, una Radeon Pro 455 con 2 GB de VRAM, arquitectura GNC de segunda generación, proceso de fabricación de 28 nanómetros, 2,08 millardos de transistores, 2 GB de VRAM GDDR5 y una opción más avanzada, la Radeon Pro 460 con 4 GB de memoria VRAM, con GNC de cuarta generación, proceso de fabricación de 14 nanómetros, 3 millardos de transistores y 4 GB de memoria VRAM GDDR5 por 120 euros adicionales.
Durante el evento de presentación de los MacBook Pro, Phil Schiller mostró una gráfica de rendimiento de estas GPU en los nuevos portátiles, mostrando datos al respecto de la mejora frente a anteriores modelos, con un aumento de rendimiento del 130% en 3D, 60% en juegos y 57% en edición de vídeo con Final Cut Pro X.
