Si notas que tienes dolores de cabeza o de cuello que antes no tenías, tal vez tengas un nuevo síndrome asociado a la revolución de los dispositivos móviles. El “Síndrome del Text Neck”. Literalmente “Cuello de texto” aunque para mi tiene más sentido llamarle “Cuello social”, por cuanto sus síntomas se desarrollan fundamentalmente asociados al uso de los medios de relación social que este tipo de dispositivos han habilitado.
De los más de siete mil millones de personas en el mundo, se calcula que casi siete mil millones tienen teléfono móvil (Sí, asi la misma cantidad de personas que de teléfonos móviles). Los mensajes de texto son la forma preferida de comunicación. Más de mil millones de mensajes se envían cada mes por todo el mundo.
Antes de la revolución de la informática móvil, niños y adolescentes pasaban su jornada inclinados sobre libros, pupitres, estudiando o haciendo exámenes. Pero ahora, cuando la jornada acaba, tanto adultos como mayores siguen inclinados sobre sus pantallas electrónicas, durante horas y horas, muchas veces hasta llegar a la cama. En otro artículo ya nos ocupamos del peligro del deslumbramiento de las pantallas electrónicas y cómo podía afectar al descanso, pero en esta ocasión, es la posición inclinada del cráneo (4,7 kilos de media) lo que añade una tensión constante a los músculos y cervicales que lo sujetan.
Podría decirse que la única ocasión en que muchos jóvenes levantan la cabeza y estiran completamente el brazo es cuando van a disparar un “selfie”… para inmediatamente volver a inclinarla y enviarla a todas sus amistades.
Esa inclinación constante del cuello provoca cambios en las cervicales, en la curvatura de la columna vertebral, los ligamentos que la soportan, los tendones y la musculatura, provocando cambios posturales. Entre las quejas más habituales asociadas al Text Neck (también denominado Tech Neck) está el dolor de cuello, dolor de hombros, espalda, brazos, dedos, manos, muñecas y codos, así como dolores de cabeza y mareos, además de temblores en las extremidades superiores.
La “hiperflexion” constante del cuello, provocada por la mirada fija durante largo en la pantalla del dispositivo móvil, provoca que cada vez le cueste al cuerpo recuperar la postura normal de reposo (las orejas a la altura de los hombros). Esto influye en que la persona parece que lleva la cabeza siempre un poco por delante, y que ande ligeramente encorvada.
Así que si has detectado que tienes dolores de cabeza o mareos, o dolores articulares que no tienes a qué atribuir, tal vez lleves demasiado tiempo mirando la pantalla equivocada.
La verdad esque me da miedo ver toda la gente como zombies a la deriva por la calle mirando el móvil. Y chocándose unos contra otros.
Es bastante patético.
Bienvenido al siglo XXI…jejeje