Ignacio Niharra, Ex-Director de Apple España

El día uno de abril Ignacio Niharra dejó la dirección de Apple España en manos de Juan Antonio Castellanos. Polémico, discutido y respetado, no cabe duda que tiene un punto de vista privilegiado sobre lo ocurrido en Apple España en estos años. Y ahora nos concede esta entrevista exclusiva, desde la tranquilidad del que sabe que ya está al otro lado de la barrera.

¿Qué diferencias hay entre la Apple España que encontraste y la de 2003?

Apple, en lo fundamental, sigue siendo la misma: esa increíble empresa capaz de sorprender al mercado y presentarle siempre lo más avanzado, lo más innovador, lo que se convertirá en standard cuando pase un poco de tiempo. Un ejemplo: en 1989, recién entrado, Apple presentó el Mac FX, una auténtica bestia que bautizamos como el más rápido del mercado. En 2003 hemos presentado, entre otras cosas, el PowerBook G4 de 17″, que incorpora por primera vez en el mundo de los portátiles una pantalla TFT de 17″, aparte de un grabador de DVD que todavía no tiene parangón en portátiles de cualquier otra marca.

Sin embargo, en lo empresarial, la Apple actual se parece poco a la que conocí, fundamentalmente por efecto del proceso de globalización. Y en dicho cambio hay cosas muy positivas y otras no tanto, sobre todo si hablamos de países pequeños como España. Posiblemente en siguientes preguntas saldrá alguna explicación más de este punto.

¿Hubo algún momento de inflexión en el mundo Mac durante tu etapa en Apple?

En este dilatadísimo tiempo, dada la celérica marcha de nuestra industria, hemos atravesado momentos de euforia y momentos de desolación. Sin ningún orden, pero de manera creo muy clara para los que han seguido nuestra trayectoria, marco como grandes momentos: la adopción del chip PowerPc; la gama Performa, que marcó el camino de la informática de consumo, absoluto precedente de lo que hoy es el “estilo de vida digital”; el fichaje de Steve Jobs por Gilbert Amelio; el iMac, conjuntamente con los acuerdos con Microsoft, que marcaron un punto de retorno del mercado de consumo y educativo; y por último el Sistema X que, con su estilo de vida digital, está produciendo de nuevo una inflexión positiva que muy bien pudiera ser el comienzo del gran éxito de Apple.

Como malos momentos: el gran error de cálculo, por su arriesgadísima apuesta finalmente fallida, de Mike Spindler, que llevó a Apple a una crisis de la que solamente pudo salir por su extraordinario genio innovador; la inadecuada respuesta desde Claris a la arrolladora aparición del Office de Microsoft, sin versión para Mac, que nos costó la pérdida de una buena parte del mercado educativo y de la mayoría de las grandes empresas que operaban con nuestro sistema. Afortunadamente, hoy están volviendo a nuestro entorno algunas de ellas.

¿Cual ha sido el gran logro de Apple España en estos años de gestión?

Sin duda alguna, nuestro indiscutible liderazgo en los mercados creativos, en los que nuestra participación en el mercado, muy elevada, es superior al de la mayoría de países del mundo. Son pocos los países en los que Apple tenga la presencia que tiene en España en periódicos y revistas, en editoriales, en agencias de publicidad, etc etc.

Recientemente, nuestra irrupción en el mercado de video digital, de la mano de Final Cut Pro, está también siendo extraordinaria.

Tu experiencia anterior básicamente se centraba en los recursos humanos ¿Cómo y por qué decidiste hacerte cargo del área comercial?

Desde el principio de mi etapa en Apple, proveniente de RRHH de IBM, reclamé de Pedro Riera una decidida implicación en el negocio. Desde mi querida fábrica IBM en Valencia siempre trabajé por un Departamento de Recursos Humanos (RRHH) absolutamente inmerso en los objetivos de negocio de la empresa: así pienso yo que debe ser y mi opinión es la misma actualmente.

Cuando entré en Apple, me hice cargo de la Formación del Canal de Distribución y así inicié unas excelentes relaciones con nuestros distribuidores que hoy perviven. Seguramente por eso, un día en que iniciábamos un proceso de re-estructuración en Apple, Pedro me sorprendió con la oferta de hacerme cargo de la Dirección Comercial: acepté y nunca me he arrepentido de ello, porque en realidad los Recursos Humanos se ejercen desde la Dirección, y yo lo he hecho, pero además entraba de lleno en la batalla real de conseguir éxitos para Apple.

En su momento Apple España tenía una estructura empresarial completa, que podía comprometerse a una gestión individual y a unos resultados en forma de beneficios o pérdidas. ¿Cómo se encajan desde la dirección la desaparición de dicha estructura, con pérdida de gran parte del poder de decisión y su conversión en casi un puro departamento de ventas?

Si entramos en la discusión sobre las bondades o maldades de la globalización que nos invade, este cambio de impresiones podría convertirse en una discusión bizantina.

Yo tiendo a no ser partidario de la globalización, pero puede ser por propio egoísmo: me hubiera gustado que me dijeran: “Nacho, ahí tienes la compañía española. Tienes que darnos tantos beneficios al final del ejercicio”. Y mi equipo y yo hubiéramos decidido con mayor autonomía sobre el uso de nuestros recursos para la obtención de nuestros resultados. Estoy seguro de que hubiera habido una mucha mayor inversión en Marketing que hubiera redundado en mejores resultados para España. También hubiera mejorado mucho la imagen que habríamos dado a nuestros clientes en España.

Sin embargo, este proceso de globalización mundial es parecido al que hubo en nuestro país en los años 50, en las que había mucho mayor poder de decisión en las llamadas sucursales. De la misma manera que las empresas españolas eligen cuidadosamente en qué lugares hay que dedicar recursos e inversiones para obtener los mejores resultados globales para la empresa nacional, la empresa global mundial lo hace.

Por ejemplo: ¿Qué reporta mayores beneficios y crecimiento: hacer una impresionante campaña de TV centrada en un ramillete de países donde tienes una gran presencia, o permitir que cada país haga pequeñitas campañas de prensa y crezca cada una un poquito? Planteado así, tan simplista (y no va muy alejado de la realidad) la respuesta parece fácil…. Pero no lo es: la discusión sigue abierta.

¿Qué te ha faltado por hacer? ¿que te hubiera gustado que sucediera?

Nada. Creo honradamente que hemos hecho una buena labor para Apple en España y que actualmente queda un gran equipo perfectamente preparado para tomar el relevo y hacerlo aún mejor. Lo que me hubiera gustado que suceda, va a suceder en los próximos años y será una continuación de lo que ya hemos hecho. Estoy seguro.

¿Qué le dirías al usuario de Apple en España?

Desde mi recientemente dejada Dirección de Apple le digo: gracias. Durante muchos años ha sido un gran orgullo el observar la fidelidad por encima de todo de nuestros usuarios para con nosotros: la más importante con gran diferencia de la industria. Hace un par de años, la revista Compra Maestra (órgano de la OCU) realizó una encuesta sin informarnos en absoluto. Ellos fueron los primeros sorprendidos cuando comprobaron que ante la pregunta:

¿Cuando cambie de ordenador, volverá a comprar la misma marca? El 87% de los usuarios de Apple respondieron “sin ninguna duda” y el 13% restante dijeron que “con toda probabilidad”. La segunda marca, IBM, tenía solamente un 57% entre las dos respuestas anteriores. Es impresionante y solamente puede uno sentirse orgulloso y agradecido.

Pero yo era ya, pero ahora soy SOLAMENTE usuario de Apple. Desde esta perspectiva, les digo a mis “colegas” que hemos adoptado lo mejor y que lo sabemos y que nos sentimos orgullosos de nuestra elección y que estamos seguros de que Apple tiene algún “genio de la lámpara” que hace posible una agradable sorpresa cada poco tiempo. Que no comprendemos del todo por qué no somos muchísimos más y que nos gustaría que Apple tuviera todo el dinero del mundo para demostrar a la gente las bondades de sus productos y soluciones. Y ahí seguiremos, ¿verdad amigos? :-)))

Bajo tu impulso nació el movimiento Grimm… ¿Sin tu respaldo personal el proyecto se queda un poco cojo?

Del Proyecto Grimm hablaría y no pararía nunca. Es simplemente maravilloso. Pero, entiéndeme, el Proyecto Grimm SON los maestros y profesores que día a día se dejan la piel y sus horas libres y parte de su vida personal y familiar, simplemente por vocación por la enseñanza, por mejorar las herramientas que están permitiendo que sus alumnos se eduquen plenamente en la sociedad que vivimos hoy.

Apple ha ayudado mucho, y también lo han hecho algunas Universidades y otras muchas personas desinteresadas….y hasta con mucha timidez alguna Comunidad Autónoma.

El Proyecto Grimm, en la parte que a Apple concierne, está en muy buenas manos y seguirá dando muchas satisfacciones a sus “socios” y algún que otro quebradero de cabeza a los que tienen la responsabilidad de invertir sus dineros en una Educación al servicio de la sociedad actual. Ojalá abran los ojos y se convenzan de la ausencia absoluta de “peligros”; a la hora de dejar elegir a los docentes las herramientas que estimen más adecuadas para cooperar en la formación de los niños y adolescentes españoles.

Desde tu nueva empresa, ¿vas a tener relación con Apple como consultor externo?

Me ha sorprendido esta pregunta porque no me lo había planteado.

Mira, yo creo que, en un principio, no es prudente que oferte mis servicios a Apple. Lo que yo tengo que hacer es “quitarme de en medio”; y dejar en paz a Juan Antonio Castellanos, que va a ser un excelente Director de Apple España.

Pasado un tiempo, y ya sin que pueda producirse malentendido alguno, seguro que me sentiré orgulloso si Apple me elige para prestarle algún servicio de mi competencia que necesiten. Y además, chulo que es uno, es seguro que acertarán eligiéndome.

¿Qué ordenadores vas a montar en tu nueva empresa ;-)?

La duda ofende, el guiño conforta. ¿Es que tienes alguna duda?

¿Escribirás un libro sobre tus experiencias?

Dice Rudyard Kipling que para sentirse totalmente realizado, todo ser humano debería hacer tres cosas en la vida: tener un hijo, plantar un árbol y escribir un libro. Yo ya he hecho, con bastante profusión, las dos primeras cosas. Me falta la tercera. Y si Dios me da salud, es lo que haré en la cuarta fase de mi vida, cuando decida jubilarme. Pero ahora inicio la tercera y el toro ya bufa en los chiqueros.

Muchísimas gracias Nacho por concedernos esta entrevista y, sinceramente, te deseamos toda la suerte en esta nueva etapa. ¡Hasta pronto!