El Gobierno griego ha decidido prohibir los juegos electrónicos, incluido los de ordenador, en un intento de terminar con el “vicio” de los casinos online.
Al parecer el mayor problema que tienen las empresas y el Gobierno heleno es que sus empleados, con acceso a Internet, se pasan el tiempo laboral jugando en los casinos online. Para acabar con ello, se ha aprobado una Ley con la que el simple hecho de jugar con un portátil en un hotel podría suponer una multa de hasta 10.000 € (unos 16 millones y medio de pesetas).
El Gobierno ha decidido tomar esta medida al ser incapaz de separar los juegos legales de los juegos ilegales.