Comentábamos anteriormente sobre el trailer de la serie “Detrás del Mac” que anticipaba el documental sobre Skywalker Sound.
Con motivo del Cuatro de Mayo (día mundial de Star Wars) aprovechando el juego de palabras “May the Force Be with You” y su similaridad con May the Fourth (el cuatro de Mayo) Apple ha publicado el documental completo.
Como hemos dicho en nuestra cuenta de Twitter: Si te gusta el diseño, el sonido, el cine, la creatividad, o tienes algo de sensibilidad artística, es de visionado obligatorio, porque la pasión, la devoción, el compromiso y la vitalidad que muestran todos los profesionales que aparecen en la película es absolutamente inspiradora.
Skywalker Sound utiliza 130 racks Mac Pro, 50 iMac, 50 MacBook Pro y 50 ordenadores Mac mini con Pro Tools, todos los cuales se conectan de forma remota a una sala de máquinas central. El estudio también utiliza una flota de dispositivos iPad, iPhone y Apple TV para ayudar en su proceso de producción. El personal del rancho incluso hizo hincapié en el papel de los equipos más antiguos, como el PowerBook de Apple.
Ben Burtt, el diseñador de sonido de la trilogía original de Star Wars, la trilogía de la precuela y la franquicia Indiana Jones, comenta que su viaje comenzó con un Macintosh SE, e instó a los jóvenes que quieren trabajar con sonidos en películas a comenzar a construir una colección de efectos de sonido utilizando “aplicaciones baratas a las que puedes tener acceso ahora en tu iPad o MacBook, que en realidad puedes hacer todo tipo de corte y mezcla de sonido en casa”.
El editor de sonido y diseñador de sonido Al Nelson asegura que las grabaciones del iPhone son “perfectamente utilizables” en un contexto profesional. El siete veces ganador del Oscar diseñador de sonido Gary Rydstrom explicó:
Puedes contar gran parte de la historia con sonido de una manera que es menos costosa que las imágenes, por lo general, y a veces emocionalmente más poderosa. Si te interesa el sonido o el cine, puedes grabar vídeo 4K+ en tu iPhone. No hay excusa. Las cosas que forman parte de nuestra vida cotidiana son las mismas que necesitas para grabar sonido y hacer películas. Esa es la verdadera revolución. En última instancia, democratizará todo el proceso.
