¿Preparado para que te cambie la vida?¿Conoces Syncthing?

Empezamos por la declaración de principios: yo no lo conocía hasta que el buen amigo Poves me introdujo en su magia.

La mayoría hemos hecho el mismo peregrinaje: Probar Dropbox, probar iCloud, probar Google Drive… nada nos contenta y tan sólo nos conformamos con lo que hay, pero todos sabemos que no es lo que queríamos.

¿Qué queremos?

Una solución sencilla, rápida, sin complicaciones y, a ser posible, gratuita, para transferir y compartir archivos.

Ya está, No queremos más, no pedimos más. No nos preocupan las marcas, ni queremos que nos vendan “upgrades” ni tener que tragar con ilegibles documentos de “compliance” para que ellos puedan tener su trasero a salvo.

Queremos simplicidad, facilidad de uso y, como si se tratara del Mac, no tener que leer un “f*cking” manual para aprender a compartir un archivo.

Ah, qué liberación poder decirlo.

Qué ofrece Syncthing

Para empezar, Syncthing es gratuita y de código abierto. Para utilizarlo, lo descargas y lo instalas. Ya está.

Una vez lo has instalado, ya tienes un nodo de Syncthing operativo. Ya está listo para sincronizar, con cualquier otro nodo Syncthing, sin más pasos añadidos. No hay instaladores, ni gestión de paquetes, (aunque si quieres puedes descargarlos), no hay que registrarse, ni que dar un email. No hay login, ni tienes que crear una contraseña (salvo si varias personas usan el mismo equipo -en cuyo caso es mejor poner una contraseña para mantener algo de seguridad, pero es opcional. En Linux, se pueden hacer instalaciones por usuario. Si varios usuarios van a usar Syncthing en un mismo ordenador, poner contraseña a las carpetas compartidas ayudará a limitar quién puede cambiar la configuración). Tampoco tener que aceptar normas ni acuerdos de usuario. Sólo descargar y usar.

Syncthing no tiene interfaz, Sólo está en la barra de menús

Una vez lo tengas instalado, podrás crear la carpeta que desees compartir y sólo tendrás que introducir (o facilitar) la clave de tu nodo para que otro Syncthing se conecte a ella y que ellos te faciliten su clave de Syncthing.

Dado que Synthing es gratuito y no depende del almacenamiento del lado del servidor, no impone restricciones extrañas o antinaturales. Puedes utilizar todo el espacio que tengas en el disco. Puedes sincronizar tantas carpetas como desees. Puedes sincronizar cualquier carpeta, sin importar dónde se encuentre. Puedes sincronizar con cualquier persona del mundo. De hecho, puedes sincronizar cualquier carpeta con cualquier número de personas. En ningún momento tendrás que preguntarte “¿funcionará con mi plan”? Si tu hardware lo permite, funcionará. Tan simple como eso.

Esta simplicidad te permite utilizar Syncthing como una herramienta que puedes aplicar, a veces de forma creativa, a tu flujo de trabajo, no como un servicio que debas soportar sufriendo en silencio. Por ejemplo, al sincronizar ~ / Library / Fonts, si instalas una tipografía en una máquina, se instalará automáticamente en todas partes.

Cuando seleccionas la opción Open del menú, se abrirá una página web donde podrás seleccionar las carpetas que quieras compartir. Al hacer clic en +Agregar carpeta, podrás dar nombre a la carpeta que quieras compartir, o escribir la ruta a la carpeta que quieres compartir.

A la derecha de la ventana del navegador verás un apartado que pone Otros dispositivos. Si haces clic sobre +Añadir otro dispositivo, podrás añadir el dispositivo remoto con el que quieras compartir. Para ello tendrás que conocer el identificador único del otro dispositivo.

Sin registro

¿Cómo se conectan dos dispositivos, si no hay registro, cuentas, correo electrónico, etc.? ¡Sencillo! Cada dispositivo tiene una identificación única, que se genera automáticamente cuando ejecutas el programa por primera vez. Comparte esta identificación con otro dispositivo, que ellos compartan la suya y listo.

¿Lo mejor? Esos identificadores ni siquiera son secretos. Se parecen más a claves públicas, por lo que puedes intercambiarlos libremente. Pero el esquema solo funciona si ambos dispositivos conocen sus identificadores.

Incluso, si alguien con malas intenciones tuviese los dos codigos, no le serviria de nada, ya que solo sirven para transferir del punto A al B. No podria tampoco leer el cifrado porque cada lado tiene su propia clave privada.

Se trata de un sistema simple y esencial, pero también muy cómodo de usar. No hay correos electrónicos, formularios, páginas web que no responden, invitaciones, gestión de usuarios, tokens que caducan, API fallidas / desactualizadas / sobrecargadas, no hay que administrar contraseñas.

Conclusión

Puedes tener tantas carpetas compartidas con tantos grupos o usuarios como desees, y todo lo que pongas allí dentro se sincronizará automáticamente con los ordenadores conectados.

Cuando decimos que es automático, es que colocas los archivos en la carpeta compartida, y se van sincronizando aunque haya interrupciones. Prosigue desde donde se ha quedado. Si un archivo se renombra, Syncthing lo sabe y no lo reenvia.

Se puede configurar para que algunos nodos (en realidad Syncthing los llama dispositivos) sean de recepcion. O sea, que un dispositivo envie, y los otros reciban. Si hay varias personas compartiendo, los mismos archivos usan todos los dispositivos para acelerar la copia.

Ademas, se puede usar en redes internas, sin necesidad de conexión a internet para funcionar.

Alf

Propietario de www.faq-mac.com.

0 0 votos
Article Rating
Subscribe
Notify of
0 Comments
Opiniones Inline
Ver todos los comentarios
0
Me encantaría saber tu opinión, por favor, deja un comentariox
()
x