Desde que apareció el iPhone, la cuestionable óptica y resolución que incorporaba ha disparado todo tipo de ingenios para intentar mejorar los resultados. El iPhone 3GS ha mejorado la resolución y la calidad, gracias entre otras cosas al autoenfoque incorporado. Aún así, legiones de usuarios que quieren que su iPhone haga más, no han dejado de inventar caminos alternativos para conseguir sus propósitos.
Hoy os presentamos los sistemas más originales y eficaces para poder hacer fotos con macro (a corta distancia) de objetos utilizando la cámara del iPhone.
Índice
Lente de DVD
Así, en diyphotography.com enseñaban a la gente cómo romper un reproductor de DVDs para utilizar la lente de enfoque del láser.
Lente de cámara desechable
Por otro lado, en Instructables.com mostraban cómo utilizar la lente frontal de una cámara desechable para conseguir fotografiar satisfactoriamente códigos de barras.
Teóricamente (no lo hemos probado), este “objetivo” macro unido a la aplicación gratuita NeoReader, disponible en la App Store española, nos permitiría fotografiar, identificar y aprovechar los códigos de barras de prácticamente cualquier objeto que los incorpore.
En theapplepress.com se nos ofrecen dos trucos aún más sencillos (y que no requieren romper nada) para conseguir efectos sorprendentes e inimaginados con la cámara del iPhone.
Lupa de ampliación
El primero, de puro sencillo y evidente, casi sonroja: ¡colocar una lupa delante de la óptica del iPhone! Evidentemente, el autoenfoque del iPhone 3GS ayudará a conseguir centrarnos con mayor exactitud en nuestro objeto, aunque este sencillo truco también funcionará con el iPhone 3G.
A la izquierda la imagen tomada con la cámara normal del iPhone. A la derecha, foto tomada con la lupa.
Si llevar encima una lupa de aumentos nos parece engorroso, siempre podemos recurrir a las lupas en forma de tarjeta de crédito (en magnicenter.com -por ejemplo- la tienen desde 3 euros).
Gota de agua
Por último, lo más barato (aunque potencialmente peligroso) y difícil de ejecutar en entornos no controlados, es una pequeña gota de agua depositada directamente sobre la lente.
Esto dará un punto central de gran ampliación y una fuerte distorsión hacia los extremos, pero nos permitirá acercarnos más que con cualquier otro método. Es importante la cantidad de agua que depositemos, pues es conocida la “sensibilidad” del iPhone a la humedad, y si algo se infiltra por debajo de la carcasa, podemos acabar con un problema técnico muy caro. Aún así, dejar la gota sobre la lente y girar el teléfono con la cámara hacia abajo permitirá que la gravedad impida que el agua “suba” hacia el dispositivo.
¿Conoces algún otro método para hacer fotos de detalles con el iPhone? ¡Déjanos un comentario!
