John Sculley alaba la personalidad de Steve Jobs

john-sculley.jpgEl anterior CEO de Apple John Sculley (que despidió a Steve Jobs) cree que el iPhone podría ser aún más importante que Mac y dice que el popular portátil PDA Newton estaba «15 años adelantado». Hablando con TechRadar, Sculley explica la importancia del lanzamiento de iPhone – y del hombre que despidió, el actual CEO de Apple, Steve Jobs: «El genio de Apple es su habilidad para usar la tecnología para crear productos que definen cambios culturales fundamentales. El Mac definió «la tecnología personal», y el iPhone define a la «tecnología íntima» como una convergencia de comunicaciones, contenido y locación.«

Sculley alabó la estética y la comprometedora actitud hacia el diseño del co-fundador de Apple, observando, «No veo ninguna compañía de aparatos móviles que haya encontrado la manera de replicar los principios de diseño de Steve,» y continua diciendo que Jobs «aún está definiendo la plataforma«.

Mientras que Sculley lamenta la ausencia de un teclado físico para el iPhone, es entusiasta sobre la App Store, llamándola «más importante que todo lo demás

La prueba de este último alegato está en que Google, Nokia y RIM están a punto de ofrecer sus tiendas equivalentes.

Sobre el fracaso de Newton, Sculley dice, «Teníamos la idea correcta, pero no teníamos el talento único de Steve para crear un producto que cambia a la cultura…«

Fuente: Macworld

2 Comments

  1. Anónimo

    Jobs al único que le dió puerta fue al pobre de Gil Amelio que pasó con mas pena uqe gloria por Apple.

    Sculley despidió a Jobs hace ya muchos decenios realmente y éste aprovechó para fundar NEXT Computer.

    Que originó la aparicion del NEXT Cube (precursor del Apple Powermac Cube)

    En esta empresa se ayudó a gestar la HTTP ya que uno de sus trabajadores era Tim Berners-Lee

  2. jlobejon

    Es un mito decir que Sculley despidió a Jobs, según lo que he leído lo que hizo fue marginarlo en la empresa hasta que Jobs se hartó y renunció para fundar NeXt. Sculley no podía despedir al fundador de la compañía, pero hizo lo necesario para que no fuera él el que cayera. Aparte de todo, hizo bien, ya que Jobs había montado un «golde de estado» para intentar hacerle la cama. Sculley se enteró y tomó medidas…

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