La columna de Alf: ¿Debería Apple comprar Adobe?

escher-Jobs-small.jpgApple creó el ordenador y Adobe el postscript. A partir de esas dos palabras se puede desarrollar toda la historia de la informática hasta nuestros días. Desde aquellos tiempos, hace más de 20 años (en 1985), ambas empresas han ido desarrollando caminos claramente divergentes.

Los primeros indicios de separación surgieron cuando Adobe desarrolló versiones de sus programas para Windows, rompiendo definitivamente su noviazgo (algo parecido a «quiero salir con otros») y llegando casi hasta el altar con la empresa de Gates, aunque ahora parece que vuelve a encontrar calor en su «novio de toda la vida» y empieza a presumir con fuerza de que funciona en Mac.

Apple, después de pasarlas canutas intentando acostumbrarse a que su pareja saliera con otros, encontró su camino y ha ido asentándose con fuerza en tantos campos como ha decidido entrar: la computación, por supuesto. Electrónica de consumo con el iPod y el iPhone, comercio electrónico con iTunes (y ahora con el software para el iPhone/iPod touch), etc.

Ambas empresas han seguido caminos muy diferentes, y crecimientos muy diferentes.

Mientras Adobe ha seguido creciendo arañando todo lo que podía dentro de su nicho tradicional del mercado, incluso comprando a su principal competidor Macromedia, Apple ha seguido ampliando su portafolio diversificando sus actividades.

Los usuarios de productos tradicionales Apple suelen exclamar -con cierto tono frustrado- la necesidad de que Apple compre Adobe para mejorar la integración de los productos de ésta con el sistema operativo de aquella. Sin embargo, Apple hace mucho que ha decidido (y de ahí su expansión a otros campos) que el mercado de la «creatividad profesional» ya no va a experimentar crecimientos significativos, y ha centrado sus intereses en el consumo, donde la masa de clientes potenciales no hace sino expandirse.

Otra de las preguntas más repetidas en los últimos meses es ¿Para qué quiere Apple una cantidad tan «indecente» de dinero en caja? (Sólo en el último trimestre (octubre, noviembre y diciembre de 2007) el dinero en caja que tenía Apple superaba los 18 mil millones de dólares). Mientras otras empresas van adquiriendo -o lo intentan- empresas que complementan o amplían la eficiencia del rendimiento en sus sectores, Apple sigue quieta, ganando dinero a «espuertas» y sin gastar en nada que no sea el funcionamiento normal de la empresa. En un entorno tan dinámico y tan competitivo como el tecnológico en el que se mueve Apple, esta calma tan absoluta podría derivar en la pérdida de oportunidades.

Ana y Ramón, los asesores bursátiles favoritos de faq-mac.com, dicen:

«El valor total de los activos de Adobe es de unos 5.700 millones de dólares, mientras que los activos de Apple están valorados en casi 22.000 millones. Apple tiene en liquidez más de 18.000 millones de dólares, en principio suficientes para comprar Adobe, pero si existen 551 millones de acciones de Adobe y cotizan por encima de los 33 $, Adobe vale en bolsa más de 18.300 millones de dólares. Como Apple debería pagar más de lo que vale actualmente en bolsa, a Apple le falta dinero para comprar Adobe, pero no mucho… sólo faltaría decidir cuánto de más se paga por las acciones. Así que económicamente es factible.»

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Apple ya ha utilizado precisamente esta técnica para «quedarse» con los mercados de vídeo y audio. Conviene recordar que lo que ahora se conoce como Final Cut o Logic fueron creados por empresas independientes. Al pasar a propiedad de Apple, las versiones para otros sistemas operativos desaparecieron y Apple rebajó dramáticamente el precio de los programas, estableciendo una relación calidad/precio en la solución hardware/software imbatible. Para cuando los competidores quisieron reaccionar (Adobe incluido) ya era tarde. Apple se había quedado con la parte del león en esos mercados.

Tal vez ciertas comparaciones nos pondrían en perspectiva sobre una compañía y otra: en los últimos resultados comunicados, Apple ganó 9.600 millones de dólares mientras que Adobe ganó 911 millones de dólares. Adobe en los resultados del último trimestre creció un 24 %, las ventas de Apple en el último trimestre con respecto al año anterior han crecido un 35 %. Como podemos ver, las trayectorias de las empresas son engañosas. A pesar de todo lo que suena Adobe, y de sus evidentes poderes en ciertos segmentos -sobre todo relacionados con la creatividad-, cuando se la coloca al lado de Apple, se trata en realidad de una pequeña empresa que ésta podría comprar sólo con el dinero que tiene «en el bolsillo», sin necesidad de pedir créditos o de endeudarse (Apple actualmente está libre de deudas).

En la situación de concentración que se vive en el software de diseño creativo, donde sólo Adobe es un «operador global» y, apenas en el área de maquetación, Quark intenta mantener una tímida posición de competencia, si Apple introdujera Photoshop como un programa sólo para Mac, dejando la versión para Windows en «abandonware«, se produciría una auténtica disrupción en el mercado.

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A este respecto, Daniel Eran Dilger, editor y columnista del conocido sitio RoughlyDrafted.com, uno de los puntos de referencia sobre la actualidad que rodea Apple, nos cuenta:

«Creo que no hay ninguna posibilidad de que Apple compre directamente a Adobe, ya que eso supondría que Apple incorporaría un montón de cosas que no quiere, y dispararía todo tipo de problemas antimonopolio. Apple hace mejor en animar a Adobe a dar soporte a la plataforma Mac mentras que compra o crea sus propios programas para competir.

Muchos de los programas más importantes de Adobe tienen como pilares código antiguo que sería más sencillo empezar de cero que intentar adaptar el código base de Adobe. Por supuesto, ese código está completamente atado al propio sistema de desarrollo de Adobe, y sería muy difícil migrarlo a un programa nativo para Cocoa que sería más sencillo de mantener y compartir actualizaciones de código con los otros programas profesionales.»

Es convicción general que no hay ningún programa que pueda competir en el segmento profesional con Photoshop o Illustrator (y como comentamos, apenas con InDesign), lo que cerraría el círculo de la creatividad alrededor de los productos Apple y provocaría un auténtico éxodo de retorno a la plataforma Mac de profesionales que en su día se dejaron llevar por la mayor competitividad del entorno Windows.

Probablemente volvería a ser cierta la frase que era una afirmación incontrovertida hace quince años: si quieres diseñar, tienes que comprarte un Mac.

Pero no sólo eso. La incorporación de Adobe al portfolio de Apple daría además a la empresa de Cupertino ventaja sobre muchas tecnologías que hoy en día definen la vanguardia tecnológica: flash y el PDF (recientemente entregado a la ISO para que sea estándar -puede que para prevenir que caiga en otras manos). La posibilidad de que bajo un mismo paraguas se reunieran las tres tecnologías claves del futuro de la comunicación multimedia (QuickTime, Flash y PDF) daría a Apple un poder para definir lo que ocurre y lo que no, lo que se implementa y lo que no, que haría temblar a todas aquellas empresas que en estos momentos viven gracias al empleo de esas tecnologías (que es prácticamente todo internet).

Es esta posibilidad, la de poseer las tecnologías claves proporcionaría a Apple lo que más le gusta en esta vida: control. Apple tendría el control del presente y del futuro de las tecnologías, y podría integrarlas (o desintegrarlas, no nos engañemos) según conviniera a sus planes.

Para mi está claro que Apple no ha mostrado nunca interés alguno en comprar Adobe, y no creo que vaya a hacerlo ahora que no lo necesita porque está creciendo en áreas que Adobe no puede ni soñar. Pero eso no quiere decir que no sea un golpe de efecto de esos que hacen que se tambaleen los pilares y que resuenan hasta en los rincones más recónditos, porque sus implicaciones trascienden con mucho el mercado del diseño gráfico y publicitario.

¿Tú crees que Apple debería comprar Adobe?

Una Columna de opinión de Alfonso «Alf» Tejedor

6 Comments

  1. iagogm

    Mejor que no se metan en situación de monopolio. Sólo deberían pensar en comprarlo si también les pretendiera Microsoft. Cualquiera de las dos compañías intentaría que el software de Adobe desapareciera para el S.O. de la otra, lo cual sería un golpe bastante duro para cualquiera de las dos. Pero en mi opinión, Adobe debe seguir siendo independiente

  2. Kuojido

    Igual no estaba mal que comprara el 51% para manejarla en parte y no llegar a ser monopolio. E incluso volver a relanzar el famoso y tan querido FreeHand (al menos en España), y la suit ATM/ATR integradas en el programilla Tipográfico de Apple.

  3. djcc

    Creo que Apple debe comprar de manera indirecta la cantidad de acciones necesarias que le permita sentar un representante en la dirección de Adobe y luego apoyar/vetar las buenas/malas decisiones que repercuten en Apple.

  4. juandesant

    Lo que Apple hizo en su momento fue comprar a empresas punteras, aunque no fuesen líderes en su sector, para convertirlas en líderes. Algo parecido a apostar por un joven figura, cuando aún es económico, en lugar de fichar a un jugador contrastado, pero caro. Incluso el desarrollo del iPod fue comprado cuando se vio el potencial, aunque el «tratamiento Apple» fue clave en el éxito. Así que lo que importa es capturar un mercado futuro, de forma que se integre bien en Apple.

    Adobe es cualquier cosa menos joven, y sus procedimientos de desarrollo, y cultura interna, apenas casan con Apple. Pero en este mercado, el segundón parece ser Apple con su Aperture… y algunas soluciones más.

    Además, Apple está empezando a aprender a tener socios… y no es mala idea pensarse muy bien en qué quieren gastar ese dinero. Puede que el rendimiento no sea el óptimo, pero es una estrategia prudente. Y les viene muy bien para vadear la crisis que parece que se avecina sin tener que despedir a nadie.

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