Después de que HD-DVD lanzase la toalla, la desaparición de sus productos ha sido increíblemente rápida.
En los sitios de las grandes tiendas toda la referencia a HD-DVDs ha sido eliminada de sus catálogos y el término incluso está desterrado de los campos de búsqueda en sus sitios.
Con está velocidad, en una semana o dos tendrá la impresión de que HD-DVD nunca existió.
Con seguridad, todavía se pueden encontrar los reproductores a los precios más bajos en ciertas tiendas, pero las reservas desaparecen delante de nuestros ojos, una tendencia animada por estos precios.
Pronto los únicos que recordarán serán Toshiba que perdió mil millones de dólares con esta guerra, y aquellos que compraron un reproductor, pero que nunca poseerá una colección.
Fuente: HardMac
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