Hemos podido leer en un artículo de USA Today, una entrevista con Balsu Thandu, uno de los individuos que ha estado probando el iPhone durante los dos pasados meses.
Aproximadamente 200 técnicos de campo han estado probando en secreto el iPhone durante 10 semanas, sumando más de 10.000 horas de teléfono, incluyendo más de 5.000 horas de llamadas de voz y 5 gigabytes de datos. Esto es más del doble de las pruebas que se hacen en otros teléfonos.
Aquellos usuarios que estén preocupados por la durabilidad, pueden estar tranquilos de que las pruebas incluyeron sumergir el iPhone en agua, soltarlo sobre cemento, dejarlo caer en aceras y llevarlo encima mientras corría, para sudar encima de él «Se trataba de llevarlo al límite» dice Thandu.
Los técnicos han frecuentado todos los sitios donde van los clientes: edificios de oficinas, andenes de metro, escaleras mecánicas, ascensores, barras de bar atestadas, calles a hora punta… incluso entraban de incógnito en las tiendas de AT&T. Para poder hacer las pruebas y no revelar que usaban un iPhone han tenido que realizar diversas artimañas, como colocarle un calcetín de iPod, envolverlo en el periódico o llevarlo en el bolsillo y usar auriculares.
Las pruebas en la vida real también han jugado un importante papel:
«Mucha gente no se da cuenta, pero caminar te da las peores condiciones para captar un buen canal,» dice Thandu. Las señales telefónica rebotan contra los edificios, causando interferencias, y el ruido de fondo es un problema constante en las ciudades.
Apple ha seguido haciendo ajustes basándose en la retroalimentación, como mejorar la calidad del audio que originalmente no era «suficientemente alta ni clara».
Thandu está seguro de que el iPhone está listo para su lanzamiento.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.