Un reportaje dice que los inversionistas están preocupados por el futuro del presidente de Dell, Kevin Rollins, después de pasar lista la semana pasada a los portátiles incendiados y los pobres resultados financieros.
De una forma más preocupante para Dell, el Journal dijo que los grandes inversores institucionales como Fidelity se han desecho de acciones de la firma.
Varias instituciones financieras han desmejorado su estimación de las acciones de Dell.
Fidelity es un jugador importante en las acciones de tecnología – posee 30 millones de acciones de AMD, 37 millones de acciones de ATI, 84 millones de acciones de Intel, y 13 millones de acciones de Nvidia.
Los movimientos de grandes jugadores como Fidelity, Oppenheimer Funds y otros realmente pueden hacer zozobrar el barco.
Fuente: The Inquirer