Arenicola marina (o «gusana de coco») resulta ser uno de los organismos idóneos para evaluar la concentración de metales tóxicos en los estuarios que habitan. La concesión de fondos de la Unión Europa ha ayudado a perfeccionar un modelo informático relativo a la bioacumulación de metal en este organismo.
Ciertos metales como el zinc, el cadmio, la plata y el arsénico son liberados al medio ambiente a raíz de procesos industriales y otras fuentes antropogénicas. Su impacto en los ecosistemas locales puede ser muy destructivo, si bien en muchos casos resulta complejo y difícil modelar las rutas que unen la fuente y el receptor.
En el marco del proyecto Dynolug («Modelado biodinámico de la acumulación de metales tóxicos en Arenicola marina, un poliqueto clave que se alimenta de depósitos en los estuarios europeos») se emprendió una investigación exhaustiva acerca de este fenómeno. Dicho gusano es un organismo modelo ideal puesto que consume sedimentos en estuarios, muchos de los cuales están contaminados por la actividad de fábricas de las inmediaciones.
Se emplearon datos recabados sobre el terreno en el suroeste de Inglaterra con el fin de perfeccionar, en un modelo cinético, los parámetros correspondientes a los mecanismos de asimilación y almacenaje de metales de estas criaturas. A continuación el modelo se validó satisfactoriamente mediante una serie de experimentos de laboratorio en los que se expuso a ejemplares de Arenicola marina a diversas concentraciones de varios metales distintos.
Uno de los objetivos de Dynolug fue el de determinar cierto umbral de concentración de metales cuya superación conllevase la muerte segura del animal. Los investigadores descubrieron que no se trataba de un proceso tan claro y directo como se creía, puesto que el gusano era capaz de almacenar sin perjuicio parte del metal ingerido, denominada fracción detoxificada. Este hallazgo coincide con los de otros trabajos en este campo y resalta la importancia de esclarecer y tener en cuenta los mecanismos de detoxificación.
Los resultados de Dynolug y la mayor precisión del modelo resultarán de utilidad para las autoridades de gestión hídrica en su empeño por cumplir los requisitos de la Directiva Marco del Agua de la UE y otras normas.
Fuente: Cordis
