Hay algo que no se puede obviar cuando se observa cómo Apple trabaja sus mercados para mantener el liderazgo: Si cree que algo le ayudará a vender más dispositivos, irá a por ello. Ese es el caso de la tienda iTunes, de la tienda iBooks, de la App Store, de la Mac App Store,… todos los conceptos se basan en el mismo concepto: ayudan a vender hardware.
En el caso del teléfono, la gran barrera que encuentran los usuarios es que cada operador tiene sus tarifas, sus planes, su cobertura,… y no hablemos de un viaje al extranjero. Es salir del país de origen y las funcionalidades del teléfono se reducen a la mitad porque utilizar un plan de datos usando roaming está más allá de lo que las cuentas bancarias de los mortales pueden permitirse.
Así que, si Apple cree que ofreciendo un servicio de cambio automático de operador desde el propio teléfono, bien en el mismo país o bien una vez que se viaja fuera, puede apostarse una cena a que luchará (en silencio y en secreto, para que nadie lo vea venir) por conseguirlo. Y una solución así atraería a los usuarios como moscas a la miel, tanto consumidores como empresas.
La idea de Apple es que los usuarios del futuro puedan comparar precios y características de los operadores y sus planes directamente en sus iPhones, sin necesidad de tener que tratar directamente con ellos. Y esa solución es lo que ha solicitado patentar.
El concepto se detalla en la solicitud de patente “Método y aparato para utilizar un dispositivo de comunicación inalámbrica con múltiples proveedores de servicio”, según informa AppleInsider. La idea sería incluir una serie de tiendas de operadores dentro del propio teléfono. Así, Apple podría ayudar a los usuarios a encontrar el operador que mejor se adapta a sus necesidades, enumerando características y precios de los proveedores de servicio de acuerdo a ellas. Unos usuarios harán uso intensivo de planes de voz, mientras que otros pueden necesitar gran cantidad de mensajes de texto. Según estas necesidades del usuario, el sistema de Apple podría asignar una clasificación por prioridad de operadores y sus perfiles respectivos de configuración, permitiendo a los usuarios encontrar el plan y proveedor que es idóneo para ellos.
En el documento Apple observa que los fabricantes se ven obligados a producir múltiples versiones del mismo dispositivo, cada una personalizada para un proveedor de servicio inalámbrico. Apple preferiría distribuir versiones genéricas del teléfono por todo el mundo, compatibles con prácticamente todos los operadores.
Además de la flexibilidad que eso le daría a Apple, el concepto podría permitir mayor elección para el consumidor. La solicitud explica que algunos usuarios podrían preferir utilizar el mismo dispositivo móvil con diferentes proveedores según la hora del día.
Además, tampoco es descargable que, con el paso del tiempo, Apple de el paso de convertirse en un “broker” telefónico, comprando ella minutos y ancho de banda a los operadores y ofreciendo a los usuarios de iPhone sus propios planes (los planes “Apple”) con independencia del lugar y hora del día. La factura telefónica se detallaría a través de iTunes, como uno más de los servicios que ofrece la compañía de la manzana y que tiene la confianza completa de sus usuarios.
El año pasado trascendió que Apple estaba explorando este mismo concepto (que la SIM telefónica viniera integrada en el teléfono y que las activaciones se hicieran a través de Apple) creando un nuevo estándar de SIM que haría que un Iphone pudiera trabajar con múltiples operadores sin necesidad de cambiar la tarjeta. Los usuarios decidirían con qué operador desearían contratar directamente desde el dispositivo de Apple. Este interés de Apple enfadó a algunos operadores, que sintieron que el método reduciría su papel a marginal a la hora de tratar con los clientes (que dejarían de serlo de los operadores para pasar a serlo de Apple). Los operadores europeos amenazaron con suprimir los subsidios al iPhone si Apple proseguía con esos planes.
