La semana pasada la empresa Lodsys LCC. comenzó a enviar cartas a desarrolladores de la plataforma iOS de Apple acerca de los pagos que estos debían realizar para licenciar una patente de la compañía relacionada con la característica de compra de contenidos extra (in-app) desde dentro de una aplicación para los dispositivos de Apple.
Según la compañía, los desarrolladores están infringiendo la patente norteamericana 7222078 de título “Métodos y Sistemas para recopilar información de Unidades de un servicio a lo largo de una red”. La patente original fue presentada en 2003, aunque tiene una larga trayectoria en la Oficina de Patentes norteamericana que remonta hasta 1992. La patente tiene como autor a Dan Abelow.
Intellectual Ventures compró la patente de Abelow en 2004 y posteriormente la vendió a un grupo especializado en patentes que las asignaba a compañías independientes. Lodsys, la compañía detrás de esta patente, indica que ni Abelow ni Intellectual Ventures están envueltos ni autorizados para ofrecer licencias de esta patente. Dan Abelow exclusivamente trabaja como consultor para esta empresa.
Apple comenzó a ofrecer el servicio de actualizaciones desde dentro de las aplicaciones (in-App) en 2009 como parte de iOS 3.0 para el iPhone y aunque inicialmente la característica fue exclusiva para las aplicaciones de pago, la compañía de Cupertino modificó el acuerdo con los desarrolladores para permitir el acceso al servicio a las aplicaciones gratuitas.
La aproximación que está haciendo Lodsys a este asunto es totalmente diferente ante un problema de patentes: si generalmente una compañía demanda a otra por un infringimiento de uso o licencia, Lodsys reconoce que la compañía de Cupertino ha pagado los correspondientes royalties para poder ofrecer este servicio exclusivamente para sus aplicaciones y servicios pero que ese pago no amplía la cobertura del mismo a desarrolladores de todo el mundo y por ello la empresa se está acercando a estos desarrolladores en busca del pago de los correspondientes royalties, pasando por debajo del paraguas de Apple y poniendo la relación entre Apple y los desarrolladores en una situación difícil ya que la compañía de Cupertino debería reaccionar para proteger este mercado que está suponiendo la punta de lanza de la penetración de sus dispositivos.
Lodsys también ha advertido que tanto Google como Microsoft disponen de los correspondientes permisos para poder usar la patente para sus propios servicios y aplicaciones, pero eso no implica, al igual que para Apple, que puedan ofrecer servicios similares a los desarrolladores para sus plataformas.
Lodsys busca ganar dinero con este asunto: hasta 0,575 dólares de los beneficios en Estados Unidos hasta la expiración de la patente. Esta cifra supone el pago de 5.570 dólares por año para una aplicación que factura un millón de dólares al año. Lodsys da un plazo de 21 días a los desarrolladores para ponerse al día con el pago del royalty por la patente, tras los cuales podría tomar acciones legales contra las empresas notificadas.
Para los desarrolladores europeos y españoles las reclamaciones de Lodsys no tienen sentido debido a la diferente legislación que se aplica en el marco europeo, y de momento sus operaciones no se verán afectadas ya que la compañía no ha pedido la interrupción de los servicios basados en su patente (la distribución de contenidos in-app) pero independientemente de este punto, Apple debe tomar algún tipo de iniciativa para proteger a todos los afectados ya que en una situación así puede causar malestar en la comunidad de desarrollo, parte muy importante de la estrategia comercial de la compañía para la plataforma iOS.
Fuente: Appleinsider
Todo esto demuestra porqué las patentes de software son una catástrofe para el desarrollo de software. Por suerte en Europa no se puede patentar software, y supongo que por eso estamos a salvo, aunque habría que leer la letra pequeña del contrato cuando se acepta vender en la iTunes Store, ya que su sede está en EEUU…