La percepción común es que Steve Wozniak creó el Apple I y Steve Jobs más o menos le acompañó en el viaje. La realidad es completamente diferente. Aunque Wozniak fue responsable de toda la grandeza técnica que fue el Apple I, nunca lo habría llevado al mercado sin la famosa capacidad de negociación de Steve Jobs.
Una momento crucial en la historia de Apple llegó cuando la nueva compañía recibió el primer pedido de 50 ordenadores. El pedido generaría 25.000 dólares en ingresos, pero había un problema: ni Apple ni cualquiera de los dos dueños tenían bastante dinero para comprar las piezas necesarias para cumplir el pedido.
Steve Jobs se encargó de las negocaciones. Primero aseguró un préstamo a 90 días de 5.000 dólares y luego convenció a los proveedores para permitir a Apple tener el activo de 15.000 dólares de piezas necesarias para construir el Apple I a crédito. Los acreedores estaban prestando esencialmente dinero a una compañía que, en aquel momento, todavía tenía que hacer un dólar. Steve Jobs aseguró el préstamo que haría posible cumplir con el primer pedido de Apple I el 6 de abril de 1976.
Fuente: Apple Matters
El César lo que es del César. Quien niegue que Jobs es un genio en su campo es un necio. Tiene sus carencias y miserias, como todo ser humano, pero se dedica a algo que hace muy bien, que hace como muy pocos.
Y todo mi afecto y admiración también hacia Wozniak.
Como siempre, todo es según del color del cristal con que se mire, nadie duda de las habilidades de Jobs en su campo, pero también es muy cierto que si Jobs hubiese tenido ese dinero pero no tuviese el diseño de Wozniak tampoco tendría nada que vender, la conclusión que yo saco de esto es que si esas dos personas no se hubiesen juntado en el momento oportuno en el lugar oportuno ahora nosotros no estaríamos aquí ni tendríamos las máquinas que ahora tenemos.