Con el miedo en el cuerpo

Hoy es la conferencia inaugural de Steve Jobs en la WWDC, y no cabe duda de que en esta ocasión, la mayoría de los usuarios de Mac que nos molestamos en seguir el día a día de la empresa de la manzana por Internet, nos encuentra removiéndonos inquietos en nuestras sillas.

No cabe duda de que la situación es muy rara.

Por un lado tenemos la práctica que ha empleado últimamente Apple de provocar ella misma rumores, jugando al despiste, de forma que lo que finalmente presentaba era aún más sorpresivo e inesperado.

Y por otro lado, tenemos ese rumor que asegura que Apple ha “comprado” con publicidad el silencio de los sitios de rumores. Lo cual explicaría la ausencia casi total de especulaciones y rumores hasta prácticamente tres días antes de la conferencia anual de desarrolladores para Macintosh (WWDC).

Así que el rumor, no pudiendo salir de los habituales, surge de la periferia, y en forma de una de las peores pesadillas de los usuarios de Mac: el abandono de la diferencia.

A mi esta situación me causa una ansiedad intolerable, se me confunden “no quieren” con el “no pueden”. El deseo con la convicción.

Por un lado pienso que es altamente improbable que, en momentos de absoluto esplendor de la “diferencia” Apple, marcados por el efecto “halo” del iPod, por la estela de la “campanilla” de los ordenadores, el Mac mini y recién salida la última mascota de la galería de felinos de Apple, Tiger, pudiera llevarse una operación de tal calado en un secreto tan absoluto. Es improbable que nadie, de fabricantes de hardware, de fabricantes de software, de periféricos, etc. nadie se hubiera ido de la lengua en una operación que cambiaría completamente la cara de la plataforma Mac ante el mercado.

Tampoco pueden hacer un anuncio del tipo: en enero de 2006 pondremos a la venta un ordenador con un chip de Intel. Eso provocaría una incertidumbre en el mercado que colisiona directamente con los planteamientos radicales de la nueva Apple, ofrecer hechos consumados.

Por otro lado, es sabido que el objetivo de Apple está en el crecimiento. Es lo único que mueve en estos momentos su I+D. No hay sitio para las flores. A lo más que aspiran es a dar un aspecto “innovador” a elementos que se sabe contrastadamente que van a funcionar en el mercado.

Apple quiere pasar del 3 al 6 y del 6 al 12, y si puede ser en dos años mejor que en tres.

¿Podría eso llevarles a licenciar su sistema operativo -como Jobs ha reconocido que le solicitan reiteradamente- a algún fabricante (¿alguien ha dicho HP?) para sacar una línea especial de ordenadores con Mac OS X, funcionando sobre Intel? Se trataría de una gama concreta, con especificaciones concretas, es decir, con las limitaciones de hardware que podrían permitir a Apple tener una fiabilidad similar a la que tiene con los Macs (que no olvidemos que prácticamente todo lo que montan actualmente ya son piezas estándar de PC).

Nadie dice que tengan que ser ordenadores clientes… podrían ser servidores, donde la batalla de las licencias con el sistema de Microsoft es mucho más favorable a Apple.

¿Pero eso que significaría para los “maqueros”? ¿Cómo veríamos un ordenador HP con Mac OS X -HP tiene una garantía postventa bastante más amplia que la que da Apple, por no hablar de la calidad de la misma? ¿Tendría un iLife PC? ¿Un iChat PC?

Las comparaciones de cuota de mercado se hacen contabilizando Windows y Mac OS -rara vez se saca una cuota de mercado de Apple frente a AMD, Intel, etc.-Aparentemente la batalla está en el sistema operativo.

¿Qué supondría para Apple que se empezaran a implantar Mac OS X sin necesidad de llevar una manzana tatuada en la carcasa? ¿Ayudaría que HP vendiera ordenadores con un sistema operativo “más seguro” que Windows y más “fácil” para el usuario que Linux? De momento en las ventas del iPod la “ayuda” de HP es más bien testimonial.

A mi me inquieta. Me causa zozobra. Entiendo las hipotéticas razones pero no puedo dejar de pensar que Apple parecería desorientada, insegura. Precisamente en un momento en que parece que nadie le puede toser y que todo lo que saca es un éxito.

Por otro lado… Siendo como son “cuatro gatos” en la fabricación de chips (y en la de ordenadores, si nos ponemos en ello) ¿qué tiene de raro que hablen entre ellos para ver si hay vías de colaboración? ¿Y si quien hablaba es el CEO de Intel con el de Apple? Si yo tuviera una empresa de fabricación de chips -la más importante del mundo- cada semana o cada dos semanas daría un telefonazo a los jefazos de las diez primeras empresas, clientes y no clientes, para preguntarles por los niños, ver cuándo podríamos jugar al golf o saber si vamos a coincidir en la conferencia 3E… y, ejem, saber si tienen algo entre manos para poder iniciar una colaboración que fuera beneficiosa para ambos. Si encima en estos tiempos que corren por un lado se me fugaran las innovaciones por el lado de un competidor (AMD), y los negocios de consumo por otro competidor (IBM), seguro que mi disposición a hablar y colaborar y ceder para ganar un nuevo cliente y dar una campanada, un golpe de efecto, ante un mercado que podría empezar a verme “débil”, “frágil”, serían mucho más acusados.

A ver si es que ahora dos de los CEOs más influyentes del mercado no van a poder hablar de sus cositas sin que se disparen los rumores 😉

En resumen, no creo que Apple haya preparado ninguna mudanza a arquitecturas Intel, y además, no quiero que lo haga. Yo, como en el chiste, virgencita, ¡que nos quedemos como estamos!.

Claro, que si lo que van a hacer es presentar una tableta multimedia (como un iPod pero aplastado por una prensa) con un Intel Inside (¿seguirá Intel subvencionando las campañas publicitarias de los fabricantes que saquen en su anuncio el simbolito de Intel Inside?) no seré yo el que salga lamentándose a la calle pidiendo la retirada.

Vamos, que esto es un sin vivir. Qué mal rato oiga. Menos mal que la espera ha sido corta, porque este rumor sale hace dos semanas, y los infartos se hubieran podido contabilizar por los callejones de la informática.

Seguiremos informando.