Google ha conseguido que la Unión Europea elimine el bloqueo antimonipolio a su compra por dos mil cien millones de dólares de Fitbit después de añadir restricciones sobre cómo podrá usar los datos de salud de los usuarios.
La compra había levantado críticas en ambos lados del Atlántico por pare de los defensores de la privacidad, organizaciones de consumidores y competidores de Google por el dominio de la empresa y como podría utilizar los datos de salud de los usuarios en la personalización de los anuncios.
Fitbit, en otros tiempos líder en el merado de dispositivos “wearables“, ha perdido cuota de mercado frente a Apple, Xiaomi, Samsung y Huawei en los pasados años.
La Comisión Europea ha aceptado un plazo de diez años con una posible extensión a otros diez años de estas limitaciones.
Google almacenará los datos de los usuarios de Fitbit de manera independiente a Google para la publicidad, y no usará los datos de Fitbit y otros dispositivos “wearables” para Google Ads. Los usuarios podrán decidir si almacenan sus datos de salud en su cuenta de Google o de Fitbit.
Google mantendrá acceso a los datos de la salud y el ejercicio de los usuarios a través de la API web de Fitbit, sin cobrar por el acceso y sujeto a la aceptación del usuario.
Seguirá ofreciendo una licencia de software API gratuita para las funcionalidades principales a los fabricantes de dispositivos, permitiendo que sus gadgets funcionen con teléfonos equipados con Android.
Comentario:
Buena suerte con esa regulación.
Google ha demostrado su incapacidad de crear hardware que se venda, el destino de Fitbit está sellado.
¿Cúal podría ser el interés de Google por FitBit si no era el acceder a los datos de salud de sus usuarios? Pensar que Google compra Fitbit por la belleza de sus diseños o por sus funcionalidades, es absolutamente lunático. Google lo que quiere es acceder a los datos de los usuarios de FitBit, aunque cada vez menos gente los use. Y hará todo lo posible por acceder a esos datos, sea de manera honesta o de manera camuflada.
Entiendo que la Administración tiene que pensar que las empresas van a cumplir los acuerdos que firman, pero a estas alturas, fiarse de Google es una ingenuidad que los ciudadanos pagaremos con nuestros datos (suponiendo que la gente no deje de comprar FitBit masivamente, ahora que es de Google),
Casualmente, el otro día vi en El Hormiguero que habían regalado una FitBit a cada persona del público asistente. Seguro que no tienen ningún interés en recopilar los datos de los usuarios…