La venganza, por lo visto, se sirve en pantalla táctil. Tras los problemas de distribución de su ‘tablet’ en Europa debido a las demandas de Apple, Samsung podría intentar paralizar la distribución del próximo iPhone en Corea cuando sea anunciado.
La compañía surcoreana planea demandar a Apple en el país por infringir sus patentes y solicitaría la prohibición de la venta del nuevo terminal en el país. Con esta maniobra Samsung utilizará una estrategia similar a la de Apple en Europa, que ha conseguido retrasar e incluso prohibir la venta del Samsung Galaxy Tab 10.1. Más información en EP