Teniendo en cuenta la batalla legal de proporciones titánicas en la que se que se encuentran envueltas Samsung y Apple a propósito de la infracción de patentes, no es de extrañar que la compañía coreana se agarre a un clavo ardiendo a la hora de buscar aliados en la industria.
Microsoft se ha convertido en el nuevo socio de Samsung, y ambas compañías han firmado un acuerdo en virtud del cual unirán sus respectivos “portfolios” de patentes con el objetivo de hacerse más fuertes respecto a ataques de terceros.
Según el acuerdo, Samsung pagará a Microsoft “royalties” por todos los teléfonos y tabletas que fabrique en las que integre Android, consolidando la fuente de ingresos que reporta más beneficios a Microsoft que Windows Phone. Más información en Silicon News