Bloomberg escribió un artículo el 16 de enero, en el cual afirman que “Steve Jobs está considerando un trasplante de hígado como resultado de las complicaciones de su tratamiento para cáncer pancreático en 2004, de acuerdo a la gente que monitoriza su enfermedad.” Esto suena bastante serio, pero cualquiera que haya estado en el Internet durante más de tres minutos, empezará a dudar en el momento que lea la frase “de acuerdo a la gente que“.
La duda es completamente justificada en este caso, ya que “la gente” es Steven Brower, profesor y cirujano en jefe de La escuela de medicina Mercer University en Savannah, Georgia. Estamos seguros de que el Dr. Bower es muy competente en lo que hace, no tiene ninguna relación con Steve Jobs en absoluto. No ha tratado a Jobs, no ha visto sus informes médicos, no-nada.
Debemos hacer hincapié en que Bloomberg pudo haber sacado de contexto el comentario de Bower – podemos imaginarnos a Brower diciendo algo como “algunas veces es necesario que los sobrevivientes de cáncer pancreático reciban un nuevo hígado,” y Bloomberg convirtió este comentario en texto para su artículo.
Cuando sigues leyendo el artículo, esto es exactamente lo que parece haber pasado: “Una opción que los doctores tienen en estos caso es un trasplante de hígado,” Bower dijo, “Es uno de los tumores en los que un trasplante puede considerarse. Es raro, pero en algunos casos se hace“.
Cuando Bloomberg confrontó a Steve Jobs con estos “descubrimientos” por teléfono, Jobs respondió en un tono directo y con toda razón: “¿Por qué no me dejan en paz? — ¿Por qué es tan importante?“.
Apple no ha hecho más comentarios al respecto.
Mientras que estoy de acuerdo con Adam en que el interés en la salud de Jobs está justificado, ya que ésta afecta directamente las decisiones y acciones de Jobs, creemos que los periodistas deben de seguir cierta ética cuando se trata de estos asuntos. Creemos que contactar a un doctor al azar, que no ha tratado a Jobs en momento alguno y pedirle que comente respecto a la salud de Jobs, para después exagerar sus comentarios solo para obtener atención está más allá de los límites éticos. Pedestal o no.
Estamos seguros de que hay periodistas que piensan llevar esto aún más allá, al contactar directamente a los doctores que atienden a Jobs. Esto es algo aún más deplorable, porque pone a los doctores en una posición difícil al tener que invocar la confidencialidad paciente-médico.
Esperamos que nuestros colegas en otros sitios no caigan tan bajo, pero tememos que esto no los detenga a algunos.
Fuente: OS News
Esto parece el tomate o algún programa de esos basura.
Jobs y Gates, decidieron en su momento unir su persona (por interes, por marketing, por vanidad, etc) a la empresa… y estos son los resultados.
Todo tiene un precio, ahora les toca lo “feo”. Se siente, que lo hubieran pensado, su beneficio habran sacado.
Jobs y Gates no decidieron unir “su persona” a la empresa, sino su imagen pública. El ámbito privado es, pues eso, privado. La confusión que demuestra este comentario es la fuente de tomates, norias y corazones que tanto gustan en España. El día que aprendamos cuál es la diferencia entre imagen pública y persona es posible que hayamos progresado algo…