Aunque es un prototipo, la idea no es mala. La cuestión es aprovechar el movimiento natural de nuestro cuerpo mientras respiras para aprovechar esa energía para ncargar un dispositivo USB.
El prototipo, contruido con algo de cinta aislante, unas bandas de goma y las piezas de una unidad de CD, produce 50 mW de carga. El creador del prototipo espera poder alcanzar los 500 mW en futuros diseños, y aunque el prototipo aún es demasiado grande, un dispositivo así nos permitiría cargar un teléfono móvil mientras hacemos deporte, o incluso recargar una batería para tenerla lista para futuros usos.
Fuente: Everything USB