¿Me cambio a OS X 10.10 Yosemite?

¿Cómo? ¡Si aún falta mucho tiempo! Eso es cierto, hasta octubre Apple no pondrá a disposición de los usuarios la versión final de OS X 10.10 Yosemite, pero con cinco meses por delante es el momento de empezar a evaluar si para las máquinas de producción de las que dependemos tendrán un valor añadido actualizando desde versiones anteriores de OS X a OS X 10.10 Yosemite.

  

Sabemos mucho más de lo que parece

La WWDC fue muy reveladora al respecto del as intenciones de Apple para OS X 10.10 Yosemite. Mientras que en OS X 10.9 Mavericks se introdujeron muchas tecnologías a nivel del sistema, aumentando el rendimiento de los ordenadores, OS X 10.10 Yosemite pinta un panorama muy diferente, con un sistema operativo muy orientado al usuario y sobre todo, a la forma con la que el usuario se interrelaciona con servicios e internet. Si bien es cierto que incluye todas las tecnologías incluidas en OS X 10.9 Mavericks, estas características puede que no sean útiles para máquinas de producción en las que se utilizan un reducido grupo de aplicaciones para el trabajo.

Adicionalmente, todos sabemos lo traumático que puede resultar la integración de un nuevo sistema operativo en un flujo de trabajo y lo complicado que puede resultar solucionar los problemas relacionados con los cambios realizados en el interior del sistema. Así, la norma general es no actualizar de forma inmediata y esperar no solo a una primera tanda de problemas de Yosemite (que los tendrá) sino que los desarrolladores de nuestras aplicaciones de cabecera publiquen actualizaciones de compatibilidad para las mismas.

Estas actualizaciones van a tener un handicap adicional y es que al modificar Apple el interfaz de OS X y sobre todo, más allá del interfaz, el cambio de fuente del sistema, va a forzar a que haya que hacer una profunda revisión del interfaz de aplicaciones y de la colocación y “tirada” de las cadenas de texto por lo que que si las actualizaciones de compatibilización con un nuevo sistema operativo suelen tardar, en esta ocasión podrían tardar un poco más.

Pero yo quiero OS X 10.10 Yosemite…

Si eres de los que no podrá aguantar con el nuevo sistemas operativo de Apple, es el momen to de empezr la evaluación del cambio. Si llevas un par de sistemas “actualizando” quizás sea el momento de pensar en una instalación limpia y aprovechar para eliminar la basura que inevitablemente vamos acumulando a lo largo del tiempo y más que los archivos de trabajo en si, todo aquellos que se queda “residente” en el sistema y que acaba lastrando la instalación con peso muerto.

Evidentemente todavía es pronto para empezar a entrar en detalles técnicos de todo lo que tenemos que hacer para asegurarnos una transición suave y sin problemas (en eso entraremos mucho más adelante con artículos especializados de esos que te arreglan el día), pero ahora si es un buen momento para empezar a evaluar que Aplicaciones tenemos instaladas y nos son inútiles o no abrimos con frecuencia para generar una lista de ellas que tengamos que eliminar para la nueva instalación.

También es un buen momento de considerar la compra de almacenamiento adicional para las copias de seguridad que necesitaremos si andas algo justo de espacio.

Y por último, empieza a evaluar la integración de Yosemite con el resto de equipos en la casa. Mucha gente da saltos sin tener en cuenta que generalmente nuestro ordenador está integrado en una red de dispositivos y de repente, al actualizar, nos podemos encontrar que nuestra versión de Apple TV ya no es compatible, el sistema no se comunica bien con otros ordenadores o dispositivos de la casa y así una larga lista. Evalúa también esta situación antes de tener que hacer un downgrade.