La empresa de Taiwan TSMC (Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, ltd) ha comenzado a probar los primeros procesos de fabricación para la creación del que será la nueva generación de chips móviles de Apple, el A6 según una fuente de Reuters.
Si esta noticia es cierta, TSMC rompe con el monopolio de fabricación de procesadores para Apple que tenía Samsung, empresa coreana con la que Apple mantiene una dura batalla legal y que ahora es uno de los competidores de la empresa de Cupertino.
Apple afronta varios retos a la hora de migrar desde Samsung a esta nueva empresa, incluyendo el uso de patentes de terceros además de los propios problemas en el diseño y fabricación de los chips. “Apple está intentando diversificar sus pedidos mientras mantiene cierta relación con Samsung” ha comentado el analista William Wang de la empresa Fubon Securities. El mismo analista ha comentado que es bastante improbable que la empresa recibe el pedido de fabricación del 100% de los nuevos procesadores, sino que Apple le entregará un 20 a 30% de la producción mientras sigue trabajando con otros proveedores.
TSMC no es una empresa pequeña: es uno de los mayores fabricantes de chips independientes en el mercado y el año pasado hizo una inversión de 7.800 millones de dólares para actualizar sus tecnologías y añadir capacidad de fabricación. Tiene experiencia en la fabricación de chips diseñados por ARM o sus licenciatarios como es el caso de Apple, cuyos procesadores están basados en esta arquitectura.
Para TSMC, que ha comentado según fuentes que tiene todas las autorizaciones y detalles listos, el entrar en el ecosistema de Apple le va a permitir reequilibrar un poco sus cuentas ya que este año sus acciones han pedido un 1,5%.
¿Quizás otro chip?
Algunos analistas no están de acuerdo en cómo va a hacer su entrada TSMC como proveedor de Apple: debido a las patentes y procesos de fabricación exclusivos necesarios para construir los procesadores que actualmente está usando Apple (A5, el A6 en el futuro), TSMC realmente lo que haría sería fabricar un segundo chip que se usaría en otros productos. Independientemente del tipo de chip que construyera para Apple, si la compañía anuncia formalmente su relación con la empresa de la manzana sus acciones tenderán de nuevo al alza, mientras los analistas estiman que la colaboración entre ambas empresas podría estimarse en una ganancia de 2 dólares por acción para el próximo año.
