Allá por el 17 de Diciembre de 2009, Yelp estaba en las etapas finales de unas negociaciones destinadas a ser comprados por Google a cambio de 550 millones de dólares. Pero tres días después, las conversaciones se habían roto. ¿Qué pasó en esos tres días?
Yahoo entró en escena y presentó una oferta de compra a Yelp por 750 millones de dólares – 200 millones más que lo que Google había ofrecido. Yelp, a través de su banco de inversiones, preguntó a Google si querían igualar la oferta. Google pasó, y una fuente dice que en realidad no creían que hubiera otra oferta en competencia.
Aquí es donde se abandona el rollo corporativo para entrar directamente en el drama de culebrón. El equipo de gestión de Yelp (empresa fundada por ex-empleados de PayPal y dedicada a la revisión de negocios locales -actualmente con presencia en EE.UU., Francia y Reino Unido) aparentemente se negaba a trabajar para Yahoo y quería aceptar la oferta de Google. El consejo directivo de Yelp, obligados por sus deberes fiduiciarios a actuar en el mejor beneficio de sus accionistas, no podía aprobar el acuerdo con Google cuando había sobre la mesa una posibilidad de acuerdo por 200 millones de dólares más.
De forma que se produjo una situación casi absurda: por un lado el equipo de gestión de Yelp se negaba a aceptar la oferta de Yahoo, y el consejo de dirección de Yelp no podía aceptar la oferta de Google ¿Resultado? todo se quedó en el aire y el acuerdo nunca se firmó… con ninguna de las empresas.
El NY Times destapó muchos de estos detalles el mismo 21 de Diciembre del año pasado, pero o bien no supo o bien calló el nombre de Yahoo como el segundo comprador. Y aparentemente sigue habiendo gente en Google que cree que Yelp en realidad nunca tuvo una segunda oferta y simplemente intentó negociar al alza. Las fuentes de TC, sin embargo, juran que la oferta de Yahoo fue real.
En la actualidad, Yelp sigue su camino de forma independiente, abriendo lentamente nuevos países en los que desarrollar su negocio.
