Los desarrolladores que han enviado aplicaciones médicas a la APp Store deberán refrendar estas aplicaciones con una serie de referencias o sus aplicaciones serán rechazadas. Aunque Apple no puede verificar la ciencia tras las aplicaciones, la demanda de estas referencias ayudarán a reducir los incidentes por plagio además de mantener bajo control las aplicaciones dedicadas a pseudociencias. La App Store ya ha tenido problemas con aplicaciones que publicitaban tratamientos con un iPhone o un iPad que en la realidad no tenían base científica alguna. Desde hace tiempo ya, Apple también ha estado retirando aplicaciones que aconsejaban la toma de dósis de medicación que no coincidían con las que el propio fabricante aconseja para un tratamiento.
Además de intentar reconducir la sección de aplicaciones médicas, Apple ha notificado a los desarrolladores que podrán seleccionar cual será la versión de la aplicación que estará disposnible para descarga como versión final para los usuarios que sigan utilizando versiones anteriores a iOS 7.