Es decir que cuando un usuario cambia a otra aplicación la anterior se cierra, y el programador debe hacer todo lo posible para que cuando el usuario vuelva a la aplicación inicial no perciba que se había cerrado. Esto, junto con la imposibilidad de correr aplicaciones en segundo plano afecta principalmente a las aplicaciones que se benefician con una conexión de red permanente como las de mensajería instantánea o comunicaciones VoIP. Por otro lado esto no afecta en nada a los juegos y a la mayoría de las aplicaciones normales
Habrá que ver como se resuelven estos incovenientes y ver si Apple arropará aplicaciones sobre su mando, por ejemplo la del cliente de mensajería de AOL que se presentó junto con el SDK