El surgimiento del DJ falso, editorial de I Voice

Puede que sólo nos lo parezca a nosotros, pero diríamos que la televisión, un medio por naturaleza conservador, parece haberse subido finalmente al carro de los DJ después de años de ignorarlos. En el momento en que las palabras Simon y Cowell, sin embargo, se unen en la misma frase con la palabra DJ*, captamos la señal de que empezarán a surgir falsos DJs en la TV.

Primero fue la Super Bowl -un espectáculo bestial de excesos presentándose como si fuera la fiesta de todos los americanos, con Madonna en el papel de Guardián de la Cripta (de la serie Historias de la cripta) comiéndose las tripas de niños vírgenes, y esos fantoches de LMFAO bailando delante de tocadiscos sin cables, arrastrando la credibilidad de M.I.A con sus “potentes habilidades”.

Después fue el desastre de los Grammy que tuvieron artistas casi-creíbles como Deadmau5 tocando con las cansadas viejas glorias del rock corporativo como Dave Grohl y la falsedad de David Guetta, que más parecía una mala imitación de Marcel Marceau ante una mesa de mezclas. Ámalos u ódialos, Skrillex, el último descubrimiento de la industria en la fábrica de chicos malos, con una larga lista que incluye desde Elvis a Iggy pasando por Marilyn, se llevaron a casa con el Grammy al Mejor Artista Novel, pero claro, Milli Vanilli también se lo llevaron.

http://www.youtube.com/watch?v=gzx3S_JkTHU

Pero de eso van los Grammys – ornamento con cero substancia, la versión de la industria del encuentro para ayudar a los artistas a sobrellevar el dolor de alimentar a un animal tan desgraciado con su sangre. Que se lo pregunten a Whitney o a Cobain… o a Biggie – oh espera, ya no podemos…

Y el problema de todo esto, los chavales puede que piensen que esto es música de baile electrónica, pero los jóvenes no se enteran mucho. Ninguno de nosotros en I Voice nos caímos del cielo como críticos geniales de la música de baile, completamente informados en dialéctica clásica y retórica cienciológica. Pasamos de ser tontainas que pensaban que la música de baile falsa de aquella época, sea cual sea, era pura y esencial. Cuando aprendimos, todos nos dimos cuenta de manera independiente de un hecho crucial: que cualquier música creada específicamente para la televisión es pop, y como tal, le ha sido arrebatada cualquier cosa que pueda ofender a alguien, en algún lugar, en cualquier momento, y como tal, es antimúsica, al menos en términos de contenido de valor. Los DJs como pantomima, por qué no, es inoffensivo, blando, y totalmente recubierto de lo que el historiador de la cultura Joe Carducci llamó “El pop narcótico” (the Pop Narcotic).

En estos días, la TV es la droga de las masas; ya matamos a la religión hace algún tiempo, así que ahora nos colgamos de aquello que colecticvamente eleve nuestras esperanzas. Por eso en vez de llamarlos falsos DJs, llamésmoles simplemente una pantomima interpretativa de los que un DJ puede hacer horas, rebajado a un sonido amable para una audiencia pop interesada más en la salvación cultural que simplemente disfrutar de la música. Pero la profesión de DJ nunca fue pensada para ese tipo de profunda necesidad social; es un género basado alrededor del disfrute de la música.

Un pulido falso DJ de televisión, ya sea David Guetta, Steve Angello o Peter Hook puede presumirse que carece de cualquier tipo de disfrute en su trabajo y se ha centrado más en los aspectos monetarios del negocio cada vez que se les pilla haciendo trampa, buscando las cámaras como cualquier otro Bono, por supuesto. A cambio, los que quieren vivir DJ’ing están angustiados por estas crecientes malas hierbas que es la música pop llegando y trayendo los mismos problemas que causaron a los vecinos de otras músicas en el pasado. Aquellos que conocen un poco la historia son conscientes de que esto es sólo el principio de muchas cosas malas y los fans de este arte deberían estar más que alarmados por la tendencia.

The Voice

* Se refieren a que Simon Cowell, el todopoderoso agente creador de X Factor, ha manifestado su intención de crear un programa para encontrar al “mejor DJ del mundo”, con la frase “Los DJs son las nuevas estrellas del rock”.