Una extensión es una aplicación dentro de una aplicación, de forma que una tercera aplicación puede llamar a esa aplicación dentro de la aplicación para poder utilizarla dentro de sí misma, modificar el contenido y guardar los cambios.
Las extensiones para Fotos funcionan así: puedes llamar a esa aplicación directamente desde Fotos, hacer cambios en la fotografía como por ejemplo y en el caso que nos ocupa, aplicar un filtro, y guardar la fotografía modificada directamente dentro de la aplicación Fotos sin la necesidad de sacar la foto, modificarla, volver a importarla…. etc.
Las extensiones se activan en el Mac cuando se arranca por primera vez la aplicación que las contiene, así que ese es el primer paso a dar. Una vez hayas arrancado la aplicación, se registrará la extensión en el sistema y hay que activarla, tarea que hay que hacer manualmente, por lo que tienes que abrir Preferencias del Sistema > Extensiones y activar la correspondiente extensión.
Ahora que ya hemos activado esta extensión para Fotos, abrimos la aplicación, seleccionamos una fotografía y pulsamos en el botón Editar. En la barra lateral hay un pequeño icono, al final, con un círculo y tres puntos: es desde allí donde podemos invocar la extensión. Al seleccionarla, cambiará el interfaz de edición de Fotos para dar paso al interfaz de la extensión. Ahora solo tienes que realizar los correspondientes cambios en la fotografía y guardar.
La aplicación de filtros u otras modificaciones de Extensiones también tienen paso atrás de forma que puedes volver a abrir esa foto modificada editándola y pulsando el el botón Volver al original.
La extensión, por cierto, de Macphun, con 30 filtros para fotos está disponible de forma gratuita en la web de su desarrollador.
