Con esta política Spotify busca mermar los ingresos de Apple y tratar de competir con el nuevo servicio Apple Music. La suscripción a través de la web de la compañía cuesta 9.9 dólares mientras que desde la aplicación iOS cuesta 12,99 dólares.
Spotify ha tenido que realizar esta campaña a través de correo electrónico debido a que desde dentro de una aplicación, las normas de la Apple Store prohiben enlazar a otras tiendas o servicios de suscripción que no estén integrados dentro de la propia tienda de Apple.