A primeros de diciembre del año pasado, la Comisión Europea inició una investigación para determinar si algunas grandes editoriales y Apple habían pactado el precio de los libros electrónicos además de desplazar a su competencia con prácticas supuestamente monopolísticas.
Además de Apple, los 5 grandes editores investigadas por pactar precios fueron Hachette Livre de la empresa Lagardère Publishing, Penguin, Harper Collins de News Corp., Simon & Schuster de la CBS y el grupo alemán Verlagsgruppe Georg von Holzbrinck que también pertenece a News Corp.
Según una nota de prensa publicada entonces por la Comisión Europea, el organismo gubernamental se estaba centrando en acuerdos supuestamente ilegales para pactar precios de los libros, restringiendo la competencia en la Unión Europea. La Oficina de Comercio Justo británica y el Departamento de Justicia norteamericano también iniciaron una investigación similar.
Los términos de los acuerdos de estas compañías fueron examinados por las autoridades competentes en busca de acciones que infringan las leyes europeas según la Comisión. La Oficina de Comercio Justo británica termino ya el año pasado ya su investigación, pero sigue trabajando con la Comisión Europea muy de cerca, que extendió su investigación a lo largo de todos los países que componen la Comunidad Europea. En marzo de 2011 se llevaron a acabo inspecciones por sorpresa como parte de las investigaciones de la Comisión en varios países europeos.
Tras el inicio de la investigación, Apple y cuatro editoriales más ofrecieron a la Comisión Europea cambios en la gestión del precio de los libros.
La resolución de este caso favorece principalmente a las editoriales que dispondrán de un mayor control sobre el precio de los libros y esperan aumentar sus ventas y beneficios con esta mejorada capacidad de maniobra. Apple y las editoriales han ofrecido a los revendedores poder marcar sus propios precios y descuentos durante un plazo de dos años y también han suspendido los contratos de favor por cinco años.
La gran ganadora de este acuerdo es Amazon que podrá jugar de una forma amplia, e incluso a la pérdida, con los precios de los libros y llegar a acuerdos puntuales con editoriales y autores.
Estas cláusulas eliminan la prohibición de realizar tratos con vendedores rivales para vender libros electrónicos más baratos que con Apple.
Apple, Simon & Schuster, HarperCollins, Hachette Livre y Macmillan, hicieron la propuesta ante los comisarios de Competencia este pasado septiembre. La editorial Penguin no participó en este acuerdo.
No seré yo quien defienda estas prácticas en las grandes empresas, así que aplaudo a Europa por parar los pies a estos pactos de precios… pero (y desde la ignorancia lo pregunto) vender por debajo del precio de coste está permitido?
No se que te diga. Comentando con un ejecutivo de la editorial ********* sobre este tema, me ha dicho que esto es campo libre para Amazon y sus prácticas rapaces, casi peor que un mercado de precios más o menos estable.